Inversiones

El sindicato petrolero complica a González Anaya y frena el lanzamiento de la Fibra E en Pemex

Los inversionistas quieren decidir sobre las operaciones de la paraestatal. El gremio se opone.

En octubre de 2015 el Gobierno Federal presentó en un rimbombante evento el Fibra E, un instrumento financiero para los inversionistas que buscaran participar en el sector energético y que prometía condiciones exitosas. Sin embargo, a la fecha, el novedoso fideicomiso sigue frenado a pesar de existir interés por él, como explican desde el sector. Esto en parte por la siempre tensa relación entre los intereses del sindicato petrolero y los de la compañía.

La apertura del mercado, a través de la reforma energética, permitió a Pemex la posibilidad de asociarse con empresas privadas para que la petrolera pudiera acceder a recursos  ante la problemática situación financiera y operativa. Por eso la Fibra E enfocada a infraestructura energética aparecía como una gran oportunidad. 

Pero pasan los años y aunque ya hay interesados no parece haber una pronta salida del fideicomiso.  Desde el mercado aseguran a LPO que el principal problema es que los inversores quieren decidir sobre as operaciones de la empresa al momento que ingresan a la Fibra E, algo que a José Antonio González Anaya no disgusta pero que si choca con la visión del gremio petrolero.

 Cuentan fuentes cercanas de la empresa que existe aún incertidumbre entre los inversionistas sobre la capacidad operativa de Pemex. "No quieren sólo aportar el dinero, también quieren participar activamente en las decisiones de la empresa y asegurar su rentabilidad", explican en las oficinas de Anzures. 

Esta demanda tiene en descontento al gremio sindicalizado, "está cuidadoso de su terreno y que estos acuerdos no afecten sus derechos laborales. Y por su parte, los inversionistas no quieren injerencia por parte del sindicato", detalla la fuente a LPO. Hasta ahora, bajo la dirección de González Anaya, se ha buscado tejer una buena relación con el sindicato de Carlos Romero Deschamps, pero la necesidad de Pemex de acceder a más recursos financieros es imperante.

Meses atrás el fondo de infraestructura, Macquire Infraestructure, hizo público su interés en la Fibra E, hubo encuentros con el director general pero desde la empresa nunca se decidió qué activos pueden monetizarse.

 A decir del analista del sector, Arturo Carranza, las mayores chances están en los petroquímicos, "pero aún no hay nada definido, sólo es de los puntos que suenan con más fuerza para este nuevo instrumento". 

El negocio de las fibras

Hay que recordar que los Fideicomisos de Inversión en Bienes Raíces (Fibra) es un vehículo de inversión que busca captar recursos del público inversionista para comprar bienes raíces y derechos sobre rentas y a cambio, reparte el 95% de lo obtenido por el arrendamiento entre sus tenedores de certificados (algo así como las acciones), a través de los dividendos.

Estos instrumentos son relativamente nuevos en el mercado mexicano, en donde se han especializado en sectores como el industrial, el hotelero, comercial y de oficinas, sin embargo, su entrada no fue sencilla ya que fue preciso modificar algunos puntos en la ley del ISR.

En el caso de la Fibra E la complejidad es mayor pues además sería aplicado al recién abierto mercado energético y pensado para infraestructura.