Reformas

Zambrano: "Mayo es el último mes para tratar segunda vuelta electoral"

Dice que ya hay un grupo de análisis en San Lázaro pero que falta voluntad política del PRI.

Mayo sería  la última oportunidad para que la Cámara de Diputados lleve a cabo las reformas en materia electoral, entre las que se plantea la segunda vuelta para la elección presidencial, la reducción de diputados y senadores plurinominales y la disminución de financiamiento a los partidos políticos.

La segunda vuelta electoral está instalada en San Lázaro y desde la bancada de Morena alegan que solo persigue perjudicar las chances de Andrés Manuel López. En la bancada del PRI el movimiento hacial el mecanismo del ballotage es impulsado por Manlio Fabio Beltrones que recientemente dijo que un presidente con menos del 25% de los votos no sería positivo para la gobernabilidad.

En tanto la reducción de legisladores plurinominales es vista con recelo dentro del PRI porque allí estiman que minaría los últimos reductos de poder del partido ante un 2018 que se perfila adverso.

El vicecoordinador del PRD, Jesús Zambrano, advirtió que al final del periodo ordinario de sesiones, que concluyó el pasado 30 de abril, las distintas bancadas en San Lázaro acordaron instalar una mesa de trabajo para que procesara un paquete electoral, pero la falta de voluntad política lo truncó.

 El legislador del sol azteca reveló que en los temas político electorales propuestos por los distintos grupos parlamentarios, la reducción del dinero público a partidos políticos fue el que mayor consenso alcanzó en la Cámara baja, incluso se habría previsto que se avalara en el Senado de la República y en los Congresos locales, ya que por tratarse de una reforma constitucional requería un mayor acuerdo, pero al último momento el PRI con su mayoría en el Congreso, bloqueó su aprobación.

Zambrano Grijalva agregó que si se lograra alcanzar un nuevo acuerdo antes de que concluya mayo, podría convocarse a un periodo extraordinario para solventar esta demanda ciudadana y reducir 50% del financiamiento público a los partidos, de lo contrario se corre el riesgo de la infiltración del crimen organizado en los próximos gobiernos a través de recursos.