Finanzas

Meade no consigue reducir el gasto neto y la deuda sigue creciendo

La deuda pública creció 3.7% en el primer trimestre. Los ingresos cayeron pero lograron un equilibrio gracias al Banxico.

Como suele pasar en economía, los números puede leerse desde varios ángulos. Dos manzanas y dos hombres, dan una manzana per cápita, aunque sea uno de los dos quien se coma ambas frutas. El informe sobre la situación económica de la Secretaría de Hacienda encaja perfecto en este ejemplo.

El Gobierno informa, por ejemplo, que los ingresos presupuestarios aumentaron 33.4% respecto al mismo periodo de 2016. Claro, para lograr ese número se toman en cuenta el Remanente de Operación del Banco de México, que explica casi en su totalidad el crecimiento. 

En este rubro ayudaron también los ingresos petroleros que se ubicaron 39% arriba de lo obtenido hace un año, cuando el crudo seguía por el piso. En cambio, cuando se analiza con más detalle, se observa que los ingresos tributarios cayeron 3.5%. 

El mismo escenario se repite con el gasto neto, que en principio creció 0.9%, en un año que se esperaba con grandes recortes. Aun así, desde Hacienda aseguran que en el primer trimestre de 2016 se gastó 46,364 millones de pesos menos de lo que se había programado.

La deuda no fue la excepción. Los equipos de Meade informaron que el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) -la medida más amplia de deuda del sector público- alcanzó un total de 9,230.1 millones de pesos, es decir, un incremento de 0.1% frente al mismo trimestre de 2016.

El argumento entonces es que se cumplirá con el objetivo, pues la actividad económica crecerá a una tasa más alta y el ratio deuda/PIB quedará -según las proyecciones- apenas por encima del 47%, frente al 50% del año pasado. 

Los especialistas consultados por La Política Online aseguran que los números "empiezan a acomodarse" para el Gobierno para que pueda cumplir con las proyecciones que estipuló en el Presupuesto 2017. Quizás el dato que más optimismo genera es el crecimiento de 2.5% que arrojaron las mediciones del INEGI para este mismo periodo. 

"Es bueno ver que, si bien el gobierno está gastando, el crecimiento está siendo mejor de lo esperado y con ello se están elevando las apuestas para el cierre del año. Y hay que advertir que la deuda está creciendo a un ritmo menor, lo que también es positivo", afirmó Arturo Carranza, especialista del Instituto Nacional de Administración Pública (INAP).

La semana pasada, Christine Lagarde dijo públicamente que el FMI comenzaba a ver una "primavera económica" que permitirá a la economía global empezar a crecer de forma más robusta, aunque planteó que será clave afrontar los desafíos que se vienen. Uno de ellos será clave para México: robustecer el comercio, justo cuando se quiere renegociar el TLCAN con la administración de Donald Trump.