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El Diablo Fernández cabildea para que Noé Sandoval reemplace a Antúnez en Seguridad

Es un ex general de fuerte predicamento entre los empresarios regiomontanos.

 A pesar de que el general Cuauhtémoc Antúnez señaló el pasado lunes que sigue en el cargo de secretario de Seguridad, todo el círculo rojo da por descontada su salida. Tan es así que  un grupo  de hombres de negocios referenciados en José Antonio "El Diablo" Fernández, mandamás de Femsa, ya se pusieron en movimiento un plan ambicioso: que el ex jefe de la Cuarta Zona militar, el general Noé Sandoval, sea el reemplazo de Antúnez.

General de división (retirado desde el pasado diciembre) que estuvo a cargo de Nuevo León en el pico de la inseguridad, que luego fue promovido por Enrique Peña Nieto como subsecretario de Defensa y que fue agregado militar en la embajada de Londres es una de las figuras de mayor predicamento en las Fuerzas Armadas.

El empresariado regiomontano lo respeta y por eso sigue siendo una figura ineludible, ya sea para aquellos hombres de negocios que quieren reunirlo con Andrés Manuel López Obrador  hasta para los que piensan que es el único que puede lograr que las cifras de seguridad no sigan empeorando.

El cabildeo se realiza en la Sedena donde Salvador Ciefuegos selecciona en estos momentos posibles prospectos para el reemplazo de Antúnez. El impedimento más grande es político: Sandoval solo aceptaría en caso de liderar el equipo de seguridad por lo cual habría que correr de esa función a Manuel González. Y aún así seguiría siendo complicado.

Más allá de Sandoval, el movimieno de Fernández confirma el cabildeo absoluto de Femsa en posiciones referidas a la seguridad en el Estado. En paralelo a estas gestiones, todos los organismos intermedios financiados por la embotelladora buscan influir en la reglamentación de la ley para la puesta en funciones del fiscal general del Estado así como también del fiscal anticorrupción. Acciones que se coordinan desde el despacho de Vidal Garza, ahora en la fundación de la empresa.

La aparición de la compañía en un tema delicado está despertando suspicacias en otros grandes conglomerados que responsabilizan a Fernández y a Garza de, lo que ellos considera, son errores políticos del gobierno estatal.