Regulación

En el mercado creen que Contreras no podrá dar marcha atrás con la separación de Telmex

Dudan además que los trabajadores estallen la huelga. De dar reversa, el regulador daría un pésimo mensaje, dicen.

A petición d Alfonso Navarrete Prida, los telefonistas aceptaron una prórroga de dos semanas para analizar de nuevo si se van a huelga. La apuesta es que pueda poder interceder ante el IFT y así, no dividir a Telmex. Hasta ahora, el regulador de telecomunicaciones no ha emitido ninguna respuesta y en el mercado las dudas se sustentan de que logren su objetivo. 

Quizá había esperanza en esta petición: "Algo debe saber el secretario que me pidió estas dos semanas. Me dijo que su voluntad era que se mantenga contrato colectivo, un solo sindicato, una sola empresa. Y me aseguró que el presidente está muy preocupado, que esperan que el IFT incluya este tema en su agenda", dijo el líder de los trabajadores telefonistas, Hernández Juárez en asamblea.

Es una resolución complicada. Por un lado, los trabajadores argumentan que viola sus derechos laborales y ahí, les dio la razón Navarrete Prida y el Telmex; pero por otro lado, existe escepticismo en el mercado de que efectivamente esta medida impacte en el fin de la regulación: romper con la preponderancia que tiene Carlos Slim en el mercado de Telecomunicaciones a través de América Móvil.

Y una vez instalado el lobby resta esperar y ver si dará frutos a favor de la empresa y sus trabajadores. En el mercado hay poca confianza. Para empezar, hay serias duda de que se haga efectiva la amenaza a huelga de los trabajadores.

"Van a pedir un plazo más y luego otro. La verdad no me sorprendió que hayan dado esta prórroga", dice una fuente del sector de telecomunicaciones a La Política Online. Su lectura es que responden a una movilización que más tiene que ver con el interés de Slim por no perder su imperio.

Aunque los trabajadores de Telmex argumentan que su pelea tiene que ver con el contrato laboral que peligra con esta división que planteó el IFT pues supone la contratación de nuevos empleos. "No sabemos si se nos renovará el contrato o traerán nuevos trabajadores. Y tampoco dan garantías a los jubilados", explican desde el Sindicato de Telefonistas.

A eso, sumar que el regulador a cargo de Gabriel Contreras pudiera ceder. Incluso, como relataba ayer LPO, había cierta duda entre los trabajadores: "Vemos al secretario con mucha disposición, pero el IFT no está en esa misma postura. No se respiran buenos vientos por esos lugares", lanzó Hernández.

Para Gonzalo Rojon, director de análisis de la consultora The Competitive Intelligence Unit (CIU), que se pueda revertir la medida resulta poco pensable. "Yo no esperaría que el IFT se suavice con esta medida y haría mal el regulador en tratar de modificar esta medida. Además, daría un mensaje fatal a la industria".

Ello a pesar de señalar que la división funcional de Telmex podría no tener los resultados esperados, considerando el antecedente en Londres, donde también fue aplicada esta medida y sin los resultados esperados.

"Al final, terminan siendo dos empresas pero del mismo dueño, es decir, Carlos Slim. No favorece en nada a la competencia. El IFT ha argumentado constantemente que las medidas que han tomado han servido para mejorar las tarifas, pero eso no es suficiente, lo primordial es que puedan entrar otros jugadores".

En ese sentido recuerda que en la última consulta pública entre operadores del sector aún existen las quejas de que no se les permite el acceso a la infraestructura de los jugadores con preponderancia o poder sustancial en el mercado. Resultado de ello fueron las últimas medidas asimétricas contra América Móvil y Televisa.