Argentina

Guerra de espías en Argentina entre Cristina y Macri

Trascendieron escuchas de la ex presidenta donde trata de “pelotudo” al su ex jefe de Inteligencia.

Una bizarra polémica se instaló por estos días en la siempreatractiva política argentina. La ex presidenta Cristina Kirchner y su sucesorMauricio Macri quedaron enredados en una guerra de espías que incluyefiltraciones de escuchas telefónicas, revelaciones de pagos en cuentas suizas yhackeo de Twitters.

Todo comenzó cuandotrascendió una escucha telefónica ordenada por la justicia federal a CristinaKirchner, en la que la ex presidenta trata de “pelotudo” a su ex jefe deinteligencia, Oscar Parrilli, y le pide que “arme” denuncias judiciales contrael ex hombre fuerte de los espías argentinos, Antonio "Jaime" Stiuso,con el que se enfrentó luego de firmar el pacto con Irán y la muere sospechosadel fiscal que lo investigaba, Alberto Nisman.

UnUna vez quetrascendió el audio, el fiscal federalGuillermo Marijuán, la denunció por abuso de autoridad, violación de deberes defuncionario público y falsa denuncia. Es que en la conversación con Parrilli,la ex presidenta le dice: "Empezá a buscar todas las causas que learmamos... No que le armamos, que denunciamos a Stiuso".

La charla comienza medioaccidentada (ver video) porque la ex presidenta encuentra a su ex jefe deinteligencia, desorientado:

-HolaOscar, comienza Cristina.

-¿Quién habla?, le responde Parrillo.

-Yo.

-¿Quiénes yo?.

-Yopelotudo, le responde molesta la ex presidenta y de inmediato le pide que busquetodas las denuncias contra Stiusso.

Cuandolos audios trascendieron, Cristina se indignó con Macri y dijo que era sometidaa un espionaje ilegal y víctima de un “Watergate autóctono”, aunque en rigorlas escuchas habían sido autorizadas por la justicia.

El amigo del Presidente

Pero casi en paralelo a este escándalo, el diario La Nacióndestapó otro que golpeó al actual jefe de inteligencia, Gustavo Arribas, unamigo personal de Macri, al punto que actualmente este ex representante de jugadores de fútbol vive en la vivienda particular del Presidente.

El diario publicó que Arribas recibió en una cuenta en Suizapagos por más de u$s 600 mil dólares de la firma brasileña Odebrecht,presuntamente como pago de una coima para que la firma se quede con la obra dela construcción del soterramiento de todo el trayecto de una de las líneas detrenes que ingresan a Buenos Aires.

La minsitra de seguridad argentina, Patricia Bullrich.

Arribas negó todo y dijo que sólo había recibido 70 mildólares en pago de un departamento que tenía en San Pablo, pero ya fue imputadopor la justicia y hasta ahora no presentó la documentación prometida. El propioMacri fue consultado por este caso en una conferencia de prensa y respondió muymolesto que su amigo ya iba a presentar la documentación. Hasta ahora no lohizo.

La diputada Lilita Carrió, una adalid de la lucha contra la corrupcióne inestable aliada de Macri, no se anduvo con vueltas y denunció a Arribas antela justicia. También dijo que la número dos de la agencia de inteligencia,Silvina Majdalani, le intervino ilegalmente su teléfono.

Para completar el sainete este miércoles le hackearon elTwitter nada menos que a la ministra de Seguridad de Macri, la ex diputada PatriciaBullrich. Allí la ministra -hackeada- anunció que renunciaba al cargo; se definiócomo “una borracha inútil” y trató al presidente Macri de “gato”, en unapelativo que rápidamente se viralizó en las redes sociales y convirtió alhashtag “Macri Gato” en trending topic.