Gasolinazo

González Anaya pide a la PGR que acelere casos por robo de gasolina para bajar el descontento

Hay más de 14000 denuncias. Cervantes está más atento al escándalo Pemex-Odebrecht.

 21 mil millones de pesos anuales. Es el número que llegó hasta la oficina de José Antonio González Anaya y que expresa lo que le cuesta a Pemex el robo de combustibles. El documento, de mediados de diciembre, fue acompañado por otra aseveración aún más compleja: el producto robado implica un negocio potencial que podría llegar hasta los 50 mil millones por año.

Desatada la furia por el gasolinazo y con un Gobierno que hasta ahora se muestra poco dúctil  para dar explicaciones, González Anaya entiende que es necesario que la ley recaiga sobre los ganadores de ese negocio clandestino, ahora más que nunca. "Aquí hay distribución, almazenaje, transportistas y operarios técnicos, no es un negocio que se pueda hacer desde un ranchito perdido", se escuchó en la oficina más grande de la torre Pemex, en Anzures. 

Pemex tiene presentadas alrededor de 14000 denuncias ante la PGR por robo de combustibles pero si embargo no ha habido novedades importantes. No se han conocido detenciones de peso ni vinculaciones a proceso. Al titular de Pemex le han deslizado que se trata de una actividad ilícita que, como otras, involucra a poder políticos locales.

González Anaya le estaría pidiendo a Raúl Cervantes que mueva algunos de esos expedientes como una vía para aplacar ánimos. Cerca de Cervantes dan por descontado que el autor intelectual del pedido es Luis Videgaray. Pero Cervantes tiene línea directa con Los Pinos y por ahora parece más interesado en otras cuestiones.

En la última semana del año el titular de la PGR dijo en dos ocasiones que era preciso que la Secretaría de la Función Pública (SFP) tenga un resultado inmediato sobre el supuesto pago de sobornos por parte de la constructora brasilera Odebrecht a altos ejecutivos de Pemex, escándalo que explotó en una corte de Brooklyn.

Al Gobierno no le preocupa tanto este caso por Pemex en si misma dado que los involucrados ya están fuera de la firma. El problema, como detalló LPO, es el efecto colateral que esa investigación va a tener para la contructora ICA, empresa que ahora dirige Guadalupe Phillips Margain, recomendada para ese puesto por el hombre más poderoso de Televisa despúes de Emilio Azcárraga: el abogado Alfonso de Angoitia.