Presupuesto

Anaya en Nuevo León, molesto porque los diputados federales no cabildean recursos

El líder nacional ve más activa a la bancada del PRI en la negociación de recursos.

 En poco más de un mes de diferencia Ricardo Anaya volvió a Nuevo León para asistir al informe del alcalde panista de San Nicolás.  Esta vez el líder nacional del PAN traería una queja concreta con los jerarcas estatales porque entiende que con la excepción de Baltazar Martínez ninguno de los diputados federales estaría en la búsqueda de recursos en el Congreso.

Quedan menos de dos semanas para la definición final en materia presupuestaria. "Hasta Alvaro Ibarra, que le quieren meter al jefe al bote (por Rodrigo Medina), se dedica a buscar recursos", le habría dicho Anaya a uno de los líderes en la entidad norteña.

El problema va más allá. Martínez responde al senador Raúl Gracia, de hecho es una de sus apuestas para la alcaldía de Monterrey en 2018. Anaya no tiene una opinión del todo positiva de Gracia. Le molesta su cercanía - sigilosa - con el gobernador de Puebla Rafaél Moreno Valle y tampoco le gusta que sus regidores en el cabildo de Monterrey voten permanentemente a favor de las iniciativas del alcalde del PRI Adrián de la Garza.

La situación de tensión con Moreno Valle va en un aspira ascendente porque Anaya cree que a estas alturas el gobernador ya debería haber decantado en su favor o en el de Margarita Zavala. En lugar de eso, el mandatario estatal esta logrando cada vez mayor autonomía de sus diputados en el Congreso.

El senador Gracia es cercano al alcalde de San Pedro Garza García, con quien Anaya viene de tener un disgusto luego de que el edil le reclamara un premio del partido para el municipio por ser un bastión panista.

El mensaje que trae Anaya es el de mayor protagonismo para los grupos del PAN que no responden al senador, especialmente el grupo de San Nicolás, que hoy por hoy está dividido entre su actual alcalde Víctor Fuentes y el anterior Ceferino Salgado, que esta muy cerca del gobernador Jaime Rodríguez Calderón.

Al líder nacional le disgusta la idea de abandonar al gobierno estatal bajo la perspectiva de que una debacle facilite el retorno del PAN al poder en Nuevo León.