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Cravioto se quedaría otro año como coordinador de Morena, aunque con menos atribuciones

La decisión de renovar su mandato se da en medio de un fuerte hermetismo y versiones cruzadas en la bancada.

Aunque el reemplazo o la renovación de la coordinación de la bancada de Morena en la ALDF debería haberse hecho hace ya varios días, los desencuentros entre los legisladores hicieron que la decisión se estirara en el tiempo más de lo inicialmente supuesto.

"César no está en el DF", señalaban algunos legisladores de la bancada del partido que dirige AMLO, mientras otros argumentaban problemas de salud, viajes de último momento y ausencias sin previo aviso. "No está ni la mitad de la bancada y es algo que tenemos que decidir estando todos, porque se trata de un tema de relevancia", agregaban en los pasillos de Donceles. 

Ya habían hecho una votación previa que, tal como lo adelantó La Política Online, había salido empatada. Por eso, se dilató la "segunda ronda" de consultas, que desde ayer está teniendo lugar en los salones de la Asamblea Legislativa del DF.

Pero en medio de un hermetismo casi absoluto y versiones cruzadas, LPO pudo confirmar que, efectivamente, la bancada ha decidido renovarle a Cravioto su curul por un año más.

"César seguirá porque es quien lo ha ejercido hasta ahora y porque incluso el propio López Obrador está interesado en que la bancada continúe tal cual está. Sin embargo, sí se modificarán algunas de las atribuciones que tenía hasta ahora, como ciertas porciones de manejo del presupuesto y la comunicación social", señalaron desde Morena.

 Además, ahora el nuevo vicecoordinador será Darío Carrasco, en sustitución deB eatriz Rojas, esposa del ex delegado en GAM, Francisco Chiguil, que pertenece a la fracciòn màs opositora que encabeza Néstor Núñez.

De esta manera, en el recinto de Donceles se confirmó, una vez más, que la apuesta de Martí Batres por Cravioto se renueva, así como la del partido, que ha decidido darle un nuevo período al frente de las decisiones estratégicas. Eso sí: los cruces internos de la bancada que se dieron durante su gestión no quedarían en la nada, sino que derivarían en la imposición de ciertas condiciones para restarle poder a través de estos "recortes" de dinero y funciones operativas en el día a día.