El posible ingreso de Slim a la TV, detrás de la guerra sucia con Televisa
El diario The Wall Street Journal reveló la semana pasada una denuncia anónima contra ejecutivos de Televisa por "fraude, corrupción" y desvío de dinero proveniente del gobierno federal, políticos y gobernadores mexicanos. La denuncia fue desmentida por la firma de Emilio Azcárraga, pero echó más leña al fuego en la guerra contra Carlos Slim.
A través de una columna de El Universal, se supo que Televisa apunta directamente contra el dueño de América Móvil. Javier Tejado Dondé, vicepresidente de la televisora, aseguró que tienen "indicios de quién puede estar detrás de esta falsa denuncia". Y apuntó: "Esto tiene una línea directa con la batalla que se dio en el sector de telecomunicaciones".
La relación histórica entre ambas empresas nunca fue sencilla. Slim decidió quitar toda la publicidad de la televisora años atrás. Pero desde que Enrique Peña Nieto impulsó la Reforma de Telecomunicaciones, esas rispideces se convirtieron en una guerra frontal.
La Reforma de EPN introdujo, entre otros cambios, el concepto de preponderancia, que se aplica cuando un agente económico tiene una participación en su sector mayor al 50% del mercado. Por supuesto, sobre las firmas preponderantes recaen obligaciones que equilibran la competencia.
El cabildeo detrás de estas leyes fue enorme. Había mucho en juego. Acaso el punto más importante de la pelea fue el modo de medir esa dominancia. Los analistas más rigurosos pedían que sea evalúe el desempeño de las compañías en cada uno de los servicios: Tv de aire, telefonía fija, internet, televisión de paga.
Pero la presión de las compañías logró que se agrupe esa evaluación en "sectores": la radiodifusión -radio y TV abierta- y la telecomunición -internet, telefonía fija y móvil, y televisión restringida-. El resultado fue que Televisa terminó como preponderante en radiodufisión y América Móvil en Telecomunicaciones.
Emilio Azcárraga, presidente del Grupo Televisa.
Para muchos analistas, este presunto "empate" entre las compañías de Carlos Slim y Emilio Azcárraga fue en realidad una virtual victoria de la televisora. Es que el Grupo Televisa cuenta también con una enorme participación -a través de Sky, Izzy y otras firmas- de 65% Tv de paga.
La victoria era por partida doble, porque aunque Televisa ostentaba el 65% del mercado de televisión restringa, el dominante en ese sector era Slim. Dicho de otro modo: no sólo no recaían sanciones sobre sus empresas, sino que su competidor debía retrasar su proceso de convergencia hacia el Cuádruple Play.
Esa protección parece estar llegando a su fin. Por estos días, está arrancando la consulta pública del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en donde las firmas analizarán y expresarán los resultados desde que se comenzaron a aplicar las nuevas leyes.
"El regulador, entonces, determinará si esas medidas han sido efectivas, si hay que eliminarlas, si hay que preservarlas o incluso modificar alguno de sus términos", explicó a La Política Online Jesús Romo, director de Telcomanía.
Para Jorge Bravo, editor en jefe de Mediatelecom, la denuncia en el Wall Street Journal se encarma en la "guerra por la convergencia" y en medio del proceso de revisión de las medidas de preponderancia, tanto de América Móvil como de Televisa. "Los dos grupos buscan ofrecer el servicio que le falta. Slim quiere ir por la televisión de paga, y Azcárraga lo quiere frenar", aseguró.
Bravo explicó que si el IFT considera que Slim está cumpliendo con todas los requisitos que se le pidieron, aunque siga siendo preponderante, le podrían dar la autorización para brindar tv de paga. "Eso es lo que está en juego y es el terreno en el cual se quiere jugar", agregó.
Y concluyó: "Parece que Televisa quiere que el terreno de la batalla por la convergencia sea el lodo. Un terreno de descalificaciones. Es un golpe que le quiere propinar a Slim. Me parece un error, porque muestra su debilidad y su temor a que efectivamente América Móvil desembarque en la Tv de paga".
El econo es tan grande que Televisa incluso intervino en la crisis de deuda de la constructora ICA y convocó a David Martínez sólo para perjudicar al Grupo Carso. Slim también jugó fuerte y dejó sin los derechos de los JJOO a Televisa, favoreciendo a Vázquez Raña. Los dardos cruzados cada vez son más intensos. ¿Hasta dónde llegará la pelea?