Madrid

Ayuso reconoce el cortocircuito con Génova: "La situación es complicada"

La presidenta de la Comunidad de Madrid dijo que "tenemos muy buena relación y entendimiento" con Martínez Almeida, ofreciéndole una tregua, pero cargó contra la dirección nacional del PP.

 La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha encontrado con el alcalde de la capital durante la misa de la Almudena y ambos trataron de mostrarse amistosos frente a las cámaras. Isabel Díaz Ayuso dijo sobre José Luis Martínez-Almeida que "tenemos muy buena relación y entendimiento", ofreciéndole una tregua, pero en cambio cargó sus críticas veladas contra la dirección nacional del PP.

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"La situación es complicada, es evidente", reconoció la mandataria madrileña, aunque señaló que "lo importante es mirar hacia adelante". "Va a acabar bien, porque estoy trabajando de la misma manera, centrada en la Comunidad, dándole a mi partido amplias mayorías, y dando sensatez y resultados, empleo, bajar impuestos. Si sigo así, todo acabará bien", continuó Ayuso, que descansa en su gestión y pretende exhibirla como resultado de su liderazgo.

Lo cierto es que Ayuso quiere medir el pulso de Génova, pero sin tirar de la soga, temiendo un punto de no retorno con los dirigentes populares. A pesar de que le hace "ilusión" presidir el PP madrileño, aseguró que busca ser respetuosa con los tiempos del partido y aspira a la unidad, ya que "solo desde esta posición se puede conseguir, sin imponer, y sin decir nada más".

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En público, la líder madrileña rechazó los "hiperliderazgos", en un intento por acercar posiciones con Pablo Casado, en momentos en que las encuestas le dan al PP una ventaja sobre el PSOE en unas hipotéticas elecciones generales. Pero volvió a insistir con que el congreso del PP de Madrid debería celebrarse "pronto, porque será mejor para todos", sin abandonar su idea de concretarlo antes de marzo.

Por su parte, Almeida ha querido rebajar la tensión. El alcalde capitalino se encuentra en una posición incómoda por la cercanía administrativa a Ayuso, mientras la dirección nacional, y en especial Casado, busca instalarlo como posible competidor de la mandataria por la presidencia del PP madrileño. "He quedado con ella para hablar hoy, a mí no me tiene bloqueado en WhatsApp", bromeó Almeida. Sin embargo, la tensión entre Ayuso y los dirigentes nacionales del PP está lejos de desvanecerse.