Estas son las razones por las que debes consultar por tu próstata
No solo las mujeres deben acudir al ginecólogo periódicamente, sino que todo varón mayor de 45 años debería concertar una visita con su urólogo una vez al año. Además, en el caso de antecedentes familiares de cáncer de próstata. Por lo que prevenir es adelantarse a futuros problemas.
"La próstata es una glándula del tamaño de una nuez que forma parte del sistema reproductivo masculino y ayuda en la producción de semen, el líquido que contiene esperma. Con la edad va aumentando de tamaño, llegando a agrandarse demasiado en algunos casos, algo que puede causar problemas", afirma el Jefe de Servicio de esta especialidad en el Hospital Quirónsalud Marbella, el doctor Pablo Navarro Vílchez.
Entre los principales problemas de la próstata, este experto apunta a:
La hiperplasia benigna de próstata: muy frecuente en hombres mayores a partir de los 40 años; tiene lugar cuando la próstata se ha agrandado, pero no es cancerosa, no se cree que aumente el riesgo de cáncer de próstata, aunque los primeros síntomas sean los mismos.
El cáncer de próstata: el más frecuente en varones y la segunda causa de muerte por cáncer en nuestro medio; su incidencia aumenta con la edad, estimándose que a los 80 años el 80% de los varones lo tienen.
La prostatitis: infección muy común generalmente causada por bacterias; las infecciones que se transmiten por contacto sexual pueden ocasionarla.
SÍNTOMAS SOBRE LOS QUE CONSULTAR
Así, el experto explica que la glándula prostática experimenta crecimiento a partir de los 40 años, momento en el que el tejido se engrosa en la zona que rodea a la uretra y puede ocasionar molestias.
"En la mayor parte de las ocasiones se trata de problemas vinculados a la acción de orinar. Puede reflejarse en episodios como orinar con mayor frecuencia, levantarse por la noche a orinar o sentir urgencia por orinar, así como disminución de la fuerza, retención de orina o incluso su pérdida, aunque este último caso no suele ser habitual", subraya Navarro Vílchez, quien recomienda consultar con un urólogo en caso de que se presente cualquiera de estos síntomas:
Ganas de orinar urgentes y frecuentes, sobre todo a la noche Problemas para comenzar a orinar o hacer sólo unas gotas Un flujo de orina que es débil, lento o termina y comienza varias veces Querer ir otra vez al baño, aunque haya ido recientemente Pequeñas cantidades de sangre en la orina Escalofríos Fiebre Sensibilidad en la parte baja del abdomen Dolor al defecar o al eyacular, o incluso sangre en el semen
Con ello, el urólogo del Hospital Quirón salud Marbella llama la atención sobre el hecho de que es muy habitual la confusión de los síntomas derivados del crecimiento benigno de próstata con el cáncer de próstata, debido a que las manifestaciones clínicas de ambas son muy parecidas, si bien ve importante señalar que existe un alto porcentaje de cánceres de próstata que no dan la cara y solo se detectan en las revisiones.
Por esta razón y por la alta prevalencia de la enfermedad, el doctor hace hincapié en la necesidad de concertar visitas de prevención con el especialista: "El cáncer de próstata es el tumor más frecuente del varón, y se sitúa como la tercera causa de mortalidad por cáncer, por detrás de los de pulmón y digestivo".
Aquí recuerda que los pacientes no deben tener miedo a la hora de acudir a la consulta de un especialista a pesar de la pandemia de COVID-19 puesto que los centros sanitarios son hoy instalaciones seguras frente al contagio, al haber diseñado circuitos libres del virus. Además, el Hospital Quirónsalud Marbella cuenta con el sello ‘Applus+ Protocolo Seguro frente a la COVID-19', que acredita su cumplimiento de los estándares más exigentes de desinfección en esta pandemia.
LAS REVISIONES SON MUY SENCILLAS
En última instancia, el Jefe de Servicio de Urología de Quirónsalud Marbella defiende que la revisión es "muy sencilla" y ha de realizarse de manera individualizada con una actitud de escucha por parte del urólogo, quien debe prestar atención a los síntomas que describa el paciente.
"La toma de esos datos aportados por el propio paciente se completa con distintas pruebas médicas como es la exploración física de los riñones, abdomen, vejiga, testículos y sobre todo de la próstata", sentencia.