La detención de Puigdemont activó una alianza de los independentistas catalanes con los nacionalistas de Cerdeña
El viaje del expresidente catalán Carlos Puigdemont a Cerdeña ha evidenciado su buena sintonía con el movimiento independentista de la isla, representado políticamente por el Partido Sardo de Acción (PSd'Az, en italiano) y su líder Christian Solinas. Se trata de una agrupación secesionista que originalmente era de izquierda, pero que con el paso se ha convertido en un movimiento conservador.
Presidente de Cerdeña de 2019, Solinas es el político italiano de mayor rango que se ha reunido con Puigdemont durante su breve periplo por la isla. De hecho, acudió a la prisión de Sassari en la que estaba detenido para mostrarle su apoyo. Y, tras la puesta en libertad del exmandatario catalán, los dos políticos independentistas mantuvieron una segunda reunión el sábado. Puigdemont había sido detenido y posteriormente liberado en Cerdeña por una orden de captura emitida por el Tribunal Supremo español, que lo reclama por malversación de fondos y sedición tras el fallido intento independentista de octubre de 2017.
Solinas es presidente desde 2019, cuando ganó las elecciones tras recibir casi la mitad de los votos, mientras que en el congreso regional el PSd'Az apenas obtuvo un 10%. Con el objetivo de asegurarse también el control legislativo de Cerdeña, su partido formó una coalición con la Liga Norte, la agrupación de ultraderecha italiana dirigido por Matteo Salvini. El PSd'Az está actualmente afiliado a la Liga.
"El movimiento catalán no está unido"
Esa sociedad que mantiene con la Liga Norte lo llevó a ser expulsado en octubre de 2020 de la Alianza Libre Europea (ALE), una amalgama de formaciones nacionalistas de izquierda. Ya en 2018, la ALE suspendió al Partido Sardo de Acción por su coqueteo con la Liga Norte. Esquerra Republicana de Catalunya, el Bloque Nacionalista Galego y Eusko Alkartasuna son algunos de los miembros de la ALE.
El movimiento independentista sardo está fragmentado. El PSd'Az es el principal partido nacionalista, sin embargo, la cuestión sobre una posible secesión de Italia no forma parte de sus prioridades de gobierno. Esa situación provoca que la principal asociación que aboga por el independentismo sea la Corona de Logu, una asamblea de autoridades locales creada en 2018 para intentar aglutinar a la decena de partidos que defienden la creación de un nuevo Estado en la isla.
Aragones y Puigdemont en el encuentro que mantuvieron en Cerdeña luego de la liberación del líder independentista.
Como parte de su viaje, Puigdemont se reunió también con Maurizio Onnis, presidente de la Corona de Logu, y con Davide Corriga, encargado de las relaciones exteriores de la asociación. Se trata de las dos cabezas visibles de esta organización que incluye a unos 70 alcaldes, concejales y asesores de pueblos sardos con poblaciones de 700 habitantes. El independentismo cuenta con entre el 5 y el 10% del apoyo en Cerdeña, según la asociación.
La independencia de Cataluña enfrenta a la ultraderecha de Italia y España
"Nuestro objetivo es hacer crecer y difundir el independentismo cívico. Queremos llevar a los sardos a la autodeterminación", dijo Onnis durante un evento público celebrado el domingo en Oristán en el que también participó Puigdemont. "Compartimos el derecho a la autodeterminación con Cataluña y otras naciones sin Estado", añadió durante el evento en el que Puigdemont dijo que el movimiento independentista sardo cuenta con todo su apoyo.
Durante su viaje, Puigdemont ha demostrado entenderse muy bien con Mario Conoci, alcalde de Alguer y miembro del Partido Sardo de Acción. Con cerca de 45.000 habitantes, Alguer es un municipio de Cerdeña en el que el 23% de su población afirma que su primer idioma es una variante del catalán, ya que el territorio formó parte de la Corona de Aragón y por ello mantienen lazos culturales.
"Teníamos que hablar del problema de Cataluña, del cual somos próximos y solidarios", dijo Conoci durante una entrevista con TV3, la televisión pública catalana, sobre la visita de Puigdemont para participar en el encuentro internacional Adifolk. Conoci fue además de las primeras voces en Cerdeña que públicamente criticó la detención de Puigdemont.
La detención en Cerdeña es la tercera que sufre Puigdemont desde que huyó de España. La primera fue en Bruselas, donde reside, y la segunda en Alemania, en marzo de 2018. El expresidente del gobierno regional es diputado del Parlamento Europeo desde 2019, pero su inmunidad fue anulada, por lo que continúa la posibilidad de ser arrestado.
Todo el foco mediático alrededor del catalán ha sido una oportunidad para que el independentismo sardo dé a conocer su causa que por el momento es minoritaria. Ningún partido político apoya a este movimiento en el parlamento nacional, aunque el PSd'Az gobierna Cerdeña desde marzo de 2019, una de las cinco únicas regiones de Italia que gozan de un estatuto que les brinda cierta autonomía.
Carles Puigdemont, su abogado, Gonzalo Boye, y el jefe de la Oficina de Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, en una rueda de prensa en L'Alguer, Cerdeña.
Mientras tanto, la detención también ha vuelto a evidenciar una vez más la buena sintonía que existe entre Salvini y el independentismo catalán. "Espero que Italia no sea protagonista de la justicia o la venganza a petición de otros países", dijo Salvini, líder de la Liga Norte.
Ese apoyo al independentismo fue la razón principal por la que la Liga y el partido ultraderechista español Vox ya no tienen relación. En 2019, Salvini y el líder de Vox, Santiago Abascal, se reunieron y dijeron que sus partidos mantenían una relación de amistad, ya que ideológicamente tienen muchos puntos en común. Sin embargo, el apoyo de Salvini a los independentistas ha terminado por dinamitar los lazos de unión entre las dos agrupaciones.
Ahora, el principal socio de Vox en Italia es Fratelli d'Italia -Hermanos de Italia-, un partido ultraconservador que compite por la derecha con la Liga Norte.