Brasil

Bolsonaro se comió una pizza en la vereda y se burló del restaurante de NYC que lo tachó por no vacunado

El presidente de Brasil está en Nueva York para hablar en la ONU pero estuvo cerca de no entrar al país por no tener las dos dosis.

 El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, protagonizó un particular episodio en Nueva York, donde se encuentra para participar de la Asamblea General de las Naciones Unidas. 

Él y parte de su comitiva, decidió salir a cenar pero se encontró con fuertes restricciones y no pudo ingresar a ninguno de los establecimientos gastronómicos de la ciudad norteamericana porque piden certificado de vacunación. 

Bolsonaro no se inoculó con ninguna de las dosis disponibles en su país y defendió el uso de la hidroxicloroquina, medicamento que no está autorizado y consumió cuando se contrajo el virus el año pasado.

Bolsonaro confirmó que dio positivo de coronavirus a centímetros de los periodistas 

Ante esta situación, la pizzería no le permitió el ingreso y el líder brasileño no tuvo más opción que comer la pizza de parado y en la calle. 

En la foto que se viralizó en las redes sociales se lo ve a Bolsonaro junto al general  y Secretario General de la presidencia, Luiz Eduardo Ramos, el secretario de Asuntos Estratégicos, el almirante Flavio Viana Rocha, el ministro de Cultura, Gilson Machado, el titular de Salud Marcelo Queiroga y el presidente de Caixa, Pedro Guimarães.

Bolsonaro tiene una sector de su electorado anti-vacunas y siempre ha sido enemigo de las restricciones sanitarias a punto tal que hizo varias presentaciones judiciales contra los gobernadores que decidieron aplicar cuarentenas. 

De todas formas, en el Gobierno utilizaron esta situación para mostrar que Bolsonaro es un persona común que no tiene problemas en comer en la calle en una de las ciudades más importantes del mundo. 

"Si se comprueba que Bolsonaro promovió la pandemia, hay motivos para un juicio político"

"El presidente es una persona a la que le gusta ir a ambientes más simples, incluso en Brasil. Lo mismo que hace ahí, lo hace aquí", dijo a los medios el ministro de Salud, Marcelo Queiroga.

"El presidente comió pizza parado en la acera porque es así, simple. El resto son fake news intencionales", defendió el ministro de Comunicaciones, Fábio Faria, quien no participa en la delegación.

Bolsonaro siguió con el tono de humor en su cuenta de Twitter donde publicó emojis que daban cuenta de la cena e incluso le respondió a un periodista crítico en la misma dinámica. Lo que busca es mostrar simpleza y además, enviar un guiño a su electorado más extremo.

El brasileño será el jefe de estado en abrir la Asamblea General de las Naciones Unidas y que no esté vacunado alimentó la versión que decía que no lo iban a dejar entrar al país. Finalmente, fue el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien autorizó el viaje.