Agustín Rossi

"Si sabía del proyecto hegemónico de Perotti no lo acompañaba"

El ex ministro de Defensa, Agustín Rossi, enfrentará al gobernador Omar Perotti en una de las internas más apasionantes del país. Se hizo lugar en las últimas horas de campaña para conversar con LPO.

 Agustín Rossi es mesurado en los gestos pero implacable con las palabras. A días de una de las elecciones más desafiantes de su vida, se hizo un tiempo para dialogar con LPO y tratar de explicar por qué decidió seguir adelante con su candidatura que deberá enfrentar en las primarias a la lista que avalan Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Omar Perotti.

Una parada brava incluso para un dirigente acostumbrado a los desafíos, que ahora deberá medirse con su antiguo aliado, el gobernador Perotti, que en los últimos meses logró encauzar y meterle velocidad a la gestión. Rossi le habla a los peronistas santafesinos y asegura que de no ser por su decisión de competir, el gobernador estaba decidido a romper con el Frente de Todos.

Recibió a LPO en su oficina del Palacio Remonda Monserrat, más conocido como la Casa de los Dragones, uno de los tantos edificios del Art Nouveau que distinguieron al casco céntrico de Rosario a principios del siglo XX.

¿Qué sucedió en Santa Fe para que el peronismo, que es oficialismo en Nación y provincia, no pudiese acordar una lista ?

Las cosas están más claras ahora que al principio y es evidente que el gobernador cambió un modelo exitoso, el de la unidad en la diversidad que nos había permitido ganar las elecciones provinciales, por un proyecto personalista y una provincialización que fue el motivo para que nos presentáramos. En un principio, nos costaba explicarlo pero finalmente está claro. La campaña del gobernador habla solamente de sus proyectos provinciales; Billetera Santa Fe y el Boleto Educativo Gratuito y ahí se terminó la campaña del gobernador.

El gobernador eligió un proyecto personal, un provincialismo que lo lleva a un modelo más cercano al de la provincia de Córdoba, al cual mira con simpatía. En su campaña no hay referencia a las políticas nacionales de Alberto y Cristina.

No hay una referencia a las políticas nacionales, ni a Alberto ni a Cristina y el protagonismo que ha adquirido el gobernador en estas últimas dos semanas, muestra que su idea es un liderazgo personal y los dirigentes que teníamos un peso relativo no coincidíamos con ese proyecto.

¿Por qué cree que el gobernador Perotti pudo contar con el apoyo del presidente y la vicepresidenta?

Tendrán otra mirada. Yo lo observo desde acá, soy un dirigente político local y la perspectiva existe. Quizá sean complementaria pero estoy tranquilo en que todo lo que dije al principio se va verificando. No es que yo dije que Perotti va a hacer un proyecto de provincialización, personal, hegemónico y no se está dando, al contrario, se está verificando.

¿Pero el poder no suele tentarse con los proyectos hegemónicos?

Para mí es un error. Si sabía que pasaba eso no lo hubiese acompañado. El hegemonismo es la naturaleza de la mediocridad. De aquel que se cree en determinado momento que tiene un pedacito de poder le puede imponer condiciones a todos.

En todo caso, ¿sería reprochable que Perotti quiera aumentar esa cuota de poder y consolidarlo?

Lo que a mí me parece que no da para la Argentina y la Santa Fe del siglo XXI tratar de construir un liderazgo unipersonal, con hegemonismo. No da la cultura política de Santa Fe para eso. Para que el gobernador se ponga de senador suplente y diga esta lista es mía o que esté en la campaña con un rol de protagonismo superior a sus propios candidatos. Yo no comparto eso. Y si le sumo que ese provincialismo lo lleva a un modelo más cercano al de la provincia de Córdoba, al cual mira con simpatía, encuentro un montón de razones por las cuales ser candidato.

No da la cultura política de Santa Fe para el personalismo de Perotti. Yo no comparto que el gobernador se ponga de senador suplente y diga esta lista es mía o que esté en la campaña con un rol de protagonismo superior a sus propios candidatos. 

Sin embargo pareciera que Córdoba le fue mucho mejor que a Santa Fe. Uno va a la provincia y ve el nivel de infraestructura que tiene y que no hay en esta provincia.

¿Cómo concluís eso?

Surge del mismo presupuesto donde Córdoba recibe más transferencias que Santa Fe en varios ítems.

Entonces es un problema de gestión del gobernador que deja que se apruebe el presupuesto nacional sin reclamar por ello.

¿A Santa Fe le falta poder de lobby en Buenos Aires? ¿Faltan acuerdos sobre intereses centrales de la provincia a defender?

Puede ser. No sé si es el tema. Santa Fe tiene una cantidad de problemas que cuando los analizas, ninguno se resuelve sólo, sino en cooperación con el gobierno nacional y digo cooperación y no subordinación, tiene que poner su mirada en la singularidad.

La necesidad de convertir en autovía a la Ruta 33 y la Ruta 34, se hace con el gobierno nacional. Resolver adecuadamente la Hidrovía o la problemática de la seguridad, se hace con el gobierno nacional. Lo primero que hace el gobernador, el ministro de Seguridad o el intendente cuando hay un hecho de impacto, dicen "gobierno nacional".

Tenemos que definir si queremos tener una relación cooperativa o una transaccional con Nación, como la que tiene el gobierno de Córdoba que a veces le va bien y a veces más o menos. El modelo cordobés en nuestra provincia significaría que se rompa el peronismo, como sucede allí donde está Hacemos por Córdoba y por otro lado el Frente de Todos.

Esto es lo que yo creo que tienen que hacer los senadores, ese puente por donde crucen las demandas de Santa Fe y vengan las soluciones que se necesitan. Después está el otro tema: si queremos tener una relación cooperativa o una transaccional como la que tiene el gobierno de Córdoba que a veces le va bien y a veces más o menos. Pero, el modelo cordobés en nuestra provincia significaría que se rompa el peronismo como sucede allí donde está Hacemos por Córdoba y por otro lado el Frente de Todos.

Fue lo que sucedió cuando surgió el Peronismo Federal en Santa Fe...

En 2009, porque Reutemann no me quiso dar la interna entonces forzó para que todos los afiliados pudieran ir en distintas listas sin que nadie pudiese usar el PJ y construyó el Peronismo Federal y nosotros fuimos con el Frente para la Victoria, en una elección súper difícil para mí porque veníamos de la 125 pero después al contrario, el peronismo tuvo primarias, algunas con resoluciones más positivas que otras.

Si usted gana, ¿cómo cree que va a impactar la derrota de Perotti en la gobernabilidad?

El gobernador no tiene porqué quedar debilitado. Yo creo que si no le va bien en las PASO tiene que dedicarse a gobernar hasta el final de su mandato y va a contar con el apoyo de todos nosotros.

Lo que sí creo que fue una imprudencia ese plan político que elaboró que consistía en una cantidad de pasos que tuvo que trocar y ponerlo a (Marcelo) Lewandowski de candidato senador por Mirabella en diputados porque en el medio, anunciamos que íbamos a conformar una lista con Alejandra Rodenas. Yo espero que con inteligencia y capacidad como la que tiene, reflexione cualquiera sea el resultado electoral.

El gobernador no tiene porqué quedar debilitado si yo gano las primarias. Creo que si no le va bien tiene que dedicarse a gobernar hasta el final de su mandato y va a contar con el apoyo de todos nosotros. Espero que con inteligencia y capacidad como la que tiene, reflexione cualquiera sea el resultado electoral.

Después de las PASO, sea quien fuera el que triunfe en la interna, el peronismo tiene un desafío muy grande que es ganar las generales. ¿Cómo analiza esa nueva instancia?

Es una nueva elección y más en este escenario donde Cambiemos tiene cuatro listas, nosotros dos y el socialismo también otras dos. Eso hizo que hubiera poca confrontación entre los Frentes. Nosotros defenderemos las políticas oficialistas y enfrente nos tratarán de descalificarnos como sea y las posiciones van a quedar muchísimo más claro.

Si llega a ser senador, ¿cuál es el proyecto más importante que impulsará?

Voy a insistir con el aguinaldo para los monotributistas que no tienen una relación de dependencia formal. No tienen ninguno de los derechos de los trabajadores en relación de dependencia. Ni licencia de enfermedad, ni vacaciones, entre otros. Lo que planteo es que en Argentina hay cuatro millones de los cuales la mitad son exclusivos y excluyentes, que solamente viven de lo que factura. Los otros, en general, tienen alguna relación de dependencia.

De esos 2 millones, las categoría más bajas que son las A; B y C y para tener una idea, la A puede facturar hasta los 370 mil pesos al año, son 30 mil pesos al mes y planteo un aguinaldo de 15 mil pesos. Inspirados en la filosofía de Cristina Fernández de Kirchner cuando tomó la decisión de extender la Asignación Universal por Hijo a los trabajadores no registrados y extenderles el derecho del aguinaldo.