Manes y Gerardo Morales acuerdan no ir al búnker de Larreta

Los radicales no quieren entregarle el liderazgo opositor. El neurocientífico se verá con Santilli un día después de las PASO en una foto "casual".

Facundo Manes no irá al búnker de Horacio Rodríguez Larreta en la noche del domingo de primarias, en una estrategia coordinada con el radical Gerardo Morales.

Desde la UCR No quieren entregarle a Larreta el liderazgo de Cambiemos porque tienen aspiraciones de presentar su propio candidato a presidente en 2023.

Es en ese marco, como adelantó LPO, que Alfredo Cornejo se mostró esta semana con Ricardo López Murphy, que enfrenta a María Eugenia Vidal en la Capital.

Morales, Cornejo y hasta el propio Manes tienen aspiración presidencial, por eso no quieren que la UCR quede otra vez como actriz de reparto en Costa Salguero, como hizo desde 2015 en los sucesivos festejos de Mauricio Macri en ese mismo escenario.

Larreta prepara un festejo con Santilli y Vidal para zanjar la disputa con Macri

La muestra de que el juego de tensiones con Larreta es una táctica no rupturista se dará el lunes siguiente a las elecciones. Manes se tomará un café con Diego Santilli en una foto "sorpresiva" que ya se acordó diez días antes. 

Eso no quiere decir que Manes no esté enojado con Larreta, lo que motivó versiones que indicaban que podría renunciar a su candidatura si pierde la interna. El neurocientífico está molesto por los ataques de los "trolls" que le llenan la cuenta de menciones negativas cada vez que tuitea algo.

Manes se cruzó con Larreta y Santilli en los estudios de un canal de televisión y le pidió al jefe de Gobierno que la cortara con los trolls. 

De hecho, Manes se cruzó con Larreta y Santilli en los estudios de un canal de televisión y le pidió al jefe de gobierno que la "cortara con los trolls". Larreta le respondió que él no tenía nada que ver y Santilli debió interceder para calmar al médico.

Un experto del "Equipo Digital del PRO" en la era Marcos Peña, aseguró en una reunión con Larreta que hay unas 15 mil cuentas de Twitter vinculadas al macrismo duro -en especial a Guillermo Dietrich-.