Tras la carta de Nicolini, Rusia reitera que la prioridad es vacunar a su población
Tras el ruido que generó la difusión de una carta de Cecilia Nicolini en la que amenaza a Rusia con romper el contrato de provisión de vacunas por las demoras en las entregas de segundas dosis, el gobierno de Vladimir Putin reiteró que la prioridad es vacunar a su propia población.
"Siempre hemos dicho que nuestra prioridad es cubrir las necesidades de vacunación de los rusos. Como saben, ahora la campaña de vacunación general se ha intensificado considerablemente, va creciendo la conciencia ciudadana y el ritmo de la vacunación aumenta cada vez más", afirmó el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov. "Es, sin duda, la prioridad", reiteró.
Los dichos del funcionario de Putin se dan después de que saliera a la luz el reclamo del gobierno argentino por las demoras en la provisión del segundo componente, que en Argentina esperan más de 6 millones de personas. Se estima que a unas 800 mil personas ya se les cumplió el intervalo de tres meses para recibir la segunda dosis.
Al respecto, Peskov dijo que Rusia cumplirá con sus compromisos de suministro pero no puso plazos concretos. "En lo que respecta al cumplimiento de los compromisos en los mercados extranjeros, incluida Argentina, por supuesto que se cumplirán", dijo el vocero, según informó la agencia Sputnik.
Peskov admitió que "se produjo un retraso" en los envíos a Argentina, pero aseguró que el Fondo de Inversiones Directas de Rusia "se encuentra en contacto con su contrapartes para solucionar los problemas que inevitablemente surgen".
La posición de Rusia no es para nada distinta a la que expuso en otros momentos en que los retrasos de los envíos a Argentina fueron muy grandes. Siempre prometió cumplir aunque nunca dio plazos y siempre priorizó la vacunación interna.