Kicillof destina $2.000 millones para ayudar a pequeñas empresas complicadas por la pandemia
El gobierno de Axel Kicillof relanzó el Programa Preservar Trabajo, una herramienta orientada a empresas micro y pequeñas y a cooperativas golpeadas por las restricciones de la segunda ola.
La iniciativa otorga una asistencia de hasta un 50% de un salario mínimo a trabajadores de empresas de hasta 80 trabajadores. Además, y a diferencia del año pasado, ya no será un motivo de exclusión haber recibido un subsidio del gobierno nacional a través del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP).
La estrategia es ampliar el alcance de las pequeñas empresas y buscan hacerlo de manera focalizada. Mientras tanto, el gobierno nacional se ocupa de las grandes empresas.
En una conferencia virtual con periodistas, la ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec, explicó que el gobierno provincial destinó unos 2.000 millones en aportes no reembolsables y allí está incluido el Programa Preservar Trabajo. "Tenemos un presupuesto que entendemos que nos va a alcanzar para todas empresas que se presenten", dijo y recordó que se trata de empresas pequeñas de no más de 80 trabajadores.
"El nivel de inscripción es menor del que entendemos debería haber", aseguró Malec y explicó que eso tiene que ver con que existe cierto desconocimiento del programa y también porque temen a los aspectos burocráticos.
"Nosotros tenemos presupuesto para atender a las empresas que estimamos necesitan de esa ayuda. Y si llega a exceder tomaremos alguna decisión. Pero en principios no hay límite de empresas. Recordemos que se trata de empresas pequeñas, apuntamos a los caídos del mapa", explicó.
La ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec.
El programa diferencia dos grandes grupos de empresas separados según el rubro. En primer lugar, las que pertenezcan a las actividades con peores indicadores como aquellas vinculadas al entretenimiento o al turismo, pese a haber recibido el beneficio nacional el año pasado, podrán aplicar en forma directa.
A las empresas comprendidas en ese grupo no se revisará la facturación porque no hay dudas de las pérdidas que sufrieron durante la pandemia.
En tanto, aquellas que integran sectores particularmente afectados como gastronomía o estética, y hayan recibido ATP durante 2020, tendrán que acreditar una caída real de la facturación, igual o mayor al 20% respecto del año 2019, para su ingreso directo.
En este segundo grupo aparecen empresas gastronómicas, confiterías, peluquerías, transporte, y venta de ropa y calzado. "En ese caso vamos a pedir y a revisar la facturación, con el mismo criterio del Repro. Si la facturación cayó 20% en términos reales, también levantamos la inhabilitación del ATP", explicó la ministra.
En todos los casos, se mantienen el resto de los requisitos vigentes: que los trabajadores se encuentren debidamente registrados y contar con inscripción ante la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Agencia de Recaudación Bonaerense (ARBA).
El programa es ejecutado por el ministerio de Trabajo, mientras que la cartera de Producción es quien remite un listado actualizado en forma permanente de las actividades económicas que pueden acceder y un informe técnico sobre la situación económica y productiva de las empresas que soliciten los beneficios.