Tucumán

Jaldo ahora se peleó con Trotta: "Respeto sus opiniones pero no las comparto"

El vicegobernador de Tucumán impulsó la interpelación del ministro de Educación local y enojó a su par nacional. El intendente de su Trancas natal se le rebeló.

El vicegobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, se peleó públicamente con el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, luego de respaldar la interpelación del ministro provincial en la Legislatura.

Jaldo está enfrentado en una guerra abierta con el gobernador Juan Manzur, que recibe todas las semanas algún gesto del Gobierno nacional en esa pelea. Pese a ese desequilibrio, Jaldo sigue resistiendo por el poder territorial que tiene en la provincia y porque maneja la Legislatura.

El enfrentamiento con Trotta se debió a que el vice de Manzur respaldó la decisión de citar al recinto al ministro de Educación, Juan Pablo Lichtmajer.

Trotta respaldó el lunes a Lichtmajer y criticó al "jaldismo" que lo citó a la Legislatura. El funcionario nacional dijo que no hay preocupación por la educación sino "especulación política", y consideró que Jaldo está "recorriendo un camino equivocado", en relación a la interna con Manzur.

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"Respeto las opiniones de Trotta pero no las comparto", disparó Jaldo. "Nosotros entendemos desde el Poder Legislativo que hay cuestionamientos públicos de diferentes sectores de la comunidad que se le vienen haciendo al ministro de Educación. Entendemos que es una oportunidad para dar explicaciones en el ámbito donde está representada toda la sociedad", dijo el vicegobernador a La Gaceta.

Manzur también había logrado el apoyo de Héctor Daer, uno de los conductores de la CGT. "No hay que estar en la mezquindad política y en la especulación", dijo Daer tras reunirse con el gobernador.

El gobernador también tuvo un apoyo simbólico en la pelea tucumana. Este lunes recibió en la Casa de Gobierno a Roberto Moreno, intendente de Trancas, el municipio que gobernó Jaldo en los noventa.

En la época de la intervención de Julio César "Chiche" Aráoz, durante el gobierno de Carlos Menem, Jaldo se quedó con el municipio de Trancas de manera literal: se convirtió en el principal terrateniente del pueblo. Por eso no lo quieren en sus pagos.