La baja del río Paraná complica las exportaciones en plena cosecha gruesa
La baja del río Paraná está generando un alto grado de preocupación en el sector agropecuario y ya está impactando en el volumen de carga de los buques de las empresas que intentan cumplir en tiempo y forma con los compromisos pactados con los compradores del exterior.
Los propios datos del Instituto Nacional del Agua muestran que la altura del río Paraná se encuentra actualmente en menos de 1 metro. El dato es que la media histórica registrada en los meses de mayo durante los últimos 24 años, es de 3,55 metros (más del triple que ahora).
"Hoy estamos embarcando entre 5.500 y 7.000 toneladas menos de cargamento por barco debido al bajo nivel de agua que registra el río Paraná", advirtió a LPO Guillermo Wade, gerente de la Cámara de Actividades Portuarias y Marítimas (CAPyM).
"Los buques que normalmente se despachan a 34,06 pies de profundidad se están despachando a unos tres pies menos", indicó Wade. "Los niveles siguen y seguirán bajando ya que a partir de ahora se ingresa en un período de bajas precipitaciones hasta diciembre", agregó.
Los registros oficiales muestran que este es el cuarto año consecutivo en el que se registran precipitaciones menores a las normales a lo largo de toda la cuenca del Río Paraná (que nace en Brasil). De hecho, el año pasado el complejo agroindustrial perdió 244 millones de dólares.
La liquidación de dólares del campo marca récords de la mano del boom de la soja
A la fecha, según un informe publicado este jueves por la Bolsa de Cereales (BCBA), se cosechó un 53% del área de siembra de soja 2020/21. En total se recolectaron alrededor de 26 millones de toneladas sobre una producción prevista en 43 millones de toneladas.
En el caso del maíz, en tanto, se cosechó un 22% del área de siembra. Esto representa, según el documento de la entidad porteña, poco más de 10 millones de toneladas (sobre 46 millones estimadas) que ya se están volcando en forma significativa al circuito comercial exportador.
Estos últimos dos datos no son menores. La baja del Río Paraná, la principal vía de acceso al Atlántico Sur y de exportación de productos agrícolas, se está produciendo en plena época de cosecha gruesa (con un total esperado de casi 90 millones de toneladas).
En la Casa Rosada siguen con atención el tema ya que preocupa que la baja del Paraná pueda afectar el normal ingreso de divisas. El sector agroexportador liquidó 9.755 millones de dólares en el primer cuatrimestre de este año (son 1707 millones de dólares más que el último récord de 2016).
Como sea, los pronósticos climáticos no son alentadores. En los próximos días no se esperan lluvias en el norte de la Argentina y sur de Brasil. Esto podría representar graves problemas logísticos, de transporte y de industrialización para el complejo agroexportador.
Algunos exportadores ya están optando por cargar en los puertos del sur de Buenos Aires por la imposibilidad de hacerlo en el Gran Rosario. Esta situación produce mayores costos de adquisición, de transporte y logísticos pudiendo incrementar el valor de la tonelada hasta 25 dólares