Tras la muerte de Lifschitz, Jatón pone en dudas al socialismo para encabezar lista
El temprano fallecimiento del ex gobernador Miguel Lifschitz por covid, impactó anímica y políticamente en el Frente Progresista. Mientras que el radicalismo que lidera Maximiliano Pullaro aprovechó para pegar el salto a Juntos por el Cambio, el ex embajador en Uruguay Mario Barletta lanzó su candidatura por twitter.
El primero en salir a poner un poco de cordura en la semana más complicada de la pandemia y el sistema sanitario al borde del colapso, fue el intendente de Rosario Pablo Javkin: "estamos en un momento crítico contando camas, no es momento de hablar de elecciones", le dijo a La Política Online.
En el mismo sentido se expresó el diputado de Creo, Ariel Bermúdez al diario La Capital; "nuestra prioridad es gobernar Rosario en un contexto de gravedad por la crisis sanitaria. La verdad es que no sobra el tiempo para las proyecciones electorales".
En Santa Fe, el intendente Emilio Jatón prefirió guardar silencio y eludió manifestarse públicamente sobre los movimientos políticos dentro del Frente Progresista pero, según pudo saber La Política Online, bastó un simple gesto para dar cuenta que el mapa electoral había cambiado con el fallecimiento del ex gobernador y principal candidato de la oposición, Miguel Lifschitz.
Es que hasta hace poco más de diez días, la concejala socialista Laura Mondino era número puesto para encabezar la lista oficialista en la ciudad pero eso se modificó y hoy, ni en el palacio municipal ni en el Concejo Deliberante lo daban por seguro pero tampoco lo descartaban.
En sintonía con el alcalde rosarino, en el equipo de Jatón evitan definiciones electorales y se concentran en la administración de la pandemia. Es que La capital, junto a Rosario y Rafaela son las zonas críticas en contagios y ocupación de camas que obligó al gobierno de Omar Perotti a extremar medidas para evitar la circulación.
Frente al nuevo panorama, el sector de la UCR que lidera el presidente del Concejo Municipal, Leandro González, que estaban dispuestos a ir a jugarle la interna al socialismo, ahora guardaron prudencia a la espera de definiciones.
Lo que no pusieron en dudas es que este espacio llamado "Radicales Libres" que integran González junto a Lucas Simoniello y el santotomesino, Fabián Oliver, ratificaron su continuidad en el Frente Progresista. A ellos se les suma los rosarinos de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, María Eugenia Schmuck y Julio Genesini, entre otros. Tanto en Santa Fe como en Rosario, los radicales revalidaron sus alianzas con los intendentes Jatón y Javkin y se despegaron de la posición de la agrupación Nuevo Espacio Organizado (NEO) que conduce Pullaro.
De hecho, en la capital provincial no descartan que las dirigentes de NEO, Virginia Coudannes y Carolina Piedrabuena, que integran el gabinete de Jatón, desistan de acompañar el ex ministro de Seguridad de Lifschitz a Cambiemos.
Por lo pronto, el Concejo de Santa Fe está conformado por 17 ediles, siete de los cuales pertenecen al oficialismo que representa la primera minoría y detrás de ellos se colocan Juntos por el Cambio (con cuatro concejales) y el justicialismo (con tres).
"Hay una oposición responsable que intenta discutir los temas y otra que solo pretende poner palos en las ruedas", analizó Laura Mondino en diálogo con LPO sobre estos espacios, por el momento evitando caer en nombres propios.
Laura Mondino, concejala socialista
Es que con Jatón de su lado, los socialistas de Fuerza del Territorio (FdT, sector al que pertenece Mondino y sobre el que se recostó el intendente para buena parte de su gestión), creen que a pesar de los cimbronazos, tienen grandes chances de encabezar las boletas legislativas del Frente Progresista.
"Llegó la hora de plasmar las ideas, valores y proyectos que militamos durante tanto tiempo", afirmó Mondino.
Dice además que Jatón "es el capital político más importante que tiene el frente", un galardón justificado "por el apoyo de la gente". "Emilio se la está jugando por integrar la ciudad como nunca nadie lo hizo, llevando obras de alto impacto a sus barrios más postergados", cuenta.
Pero Mondino reafirma en paralelo la necesidad de "mantenerse en un sendero de unidad". "El Frente Progresista sigue viéndose como una alternativa a la grieta que venden en Buenos Aires", dice, y por ello cree importante "mantenerse atentos a toda propuesta progresista que no se sienta interpelada por aquella pelea".
"Nos interesa también sumar a otros espacios, fundamentalmente a las organizaciones sociales", añade, exponiendo su intención de darle al Frente Progresista un perfil más "territorial", una cuestión algo resistida por algunos aliados.
Como sea, las elecciones venideras serán para Mondino una apuesta a "renovar las tres bancas y por qué no a sumar alguna más". Además de su silla y la de González, se pondrá en juego otra banca radical, la de María Laura Spina.
Y, en tiempos de reconfiguraciones en el Frente Progresista por la pérdida de Miguel Lifschitz, Jatón y el socialismo de la ciudad se juegan mucho más que cargos institucionales que garanticen gobernabilidad. Hoy, más que nunca, meter una cabeza de lista y coronarla con un buen caudal de votos sería recostarse en un interesante colchón de capital simbólico.