España

Ahora las infantas avisan que Juan Carlos quiere volver a España

Según explican a LPO fuentes muy próximas a Casa Real, el rey emérito quiere regresar a España para presenciar una regata.

Vacunadas y con un mensaje de Juan Carlos I. Así regresaron de Abu Dabi, hace dos semanas, las infantas Elena y Cristina. Las hermanas de Felipe VI comprobaron, in situ, que su padre está decidido a volver a España este mismo mes y que, incluso, tiene claro su primer destino: el municipio de Baiona, integrado en el área metropolitana de Vigo (Pontevedra).

Según explican a LPO fuentes muy próximas a Casa Real, el rey emérito quiere regresar a España para presenciar, en directo, la Liga de Invierno Baitra J80, la competición invernal de regatas organizada en la ría de Vigo por el Monte Real Club de Yates que se disputará en cinco jornadas hasta el próximo mes de mayo.

Juan Carlos I, enamorado de la vela, abandonó en agosto España después de una cena de despedida en el Real Club Náutico de Sanxenxo (Pontevedra), a la que convocó a empresarios y regatistas amigos, y que tuvo como anfitrión a Pedro Campos, presidente del Real Club Náutico, que también abrió las puertas de su casa al emérito, para que descansara horas antes de marcharse de España. Ahora, quiere que su regreso también esté vinculado con las regatas.

La Liga de Invierno Baitra J80 comenzó el pasado fin de semana en Baiona y están previstas otras cuatro etapas más los días 20 de marzo, 10 de abril y 15 y 29 de mayo. El deseo del rey emérito, afirman las fuentes consultadas, era haber estado ya en el municipio vigués a finales de febrero. Ahora, tiene marcado en rojo el sábado día 20.

España: las hermanas del rey Felipe pagaron para vacunarse contra el coronavirus

Las fuentes consultadas por este diario recuerdan, además, que el rey emérito, antes de su marcha de España, solía pasar "varias semanas del año" en este municipio vigués, en una residencia que le cedía un empresario amigo: "Cuando viene a Baiona, vive en un pazo modernizado, que conserva parte de su estructura antigua, y que pocos conocen".

Juan Carlos I (con gorra roja), participando en una regata.

Desde esa residencia, añaden, "solía desplazarse a Sanxenxo, a otros lugares de Pontevedra, e incluso a Portugal, sin ser visto". Un modo de vida que Juan Carlos I quiere recuperar, cansado de la monotonía de Abu Dabi: "Allí es un millonario más y no tiene cerca a sus amigos. En Pontevedra sigue siendo el rey".

En Abu Dabi es un millonario más y no tiene cerca a sus amigos. En Pontevedra sigue siendo el rey

Con ese objetivo en mente, de hecho, se vacunó hace un mes y dio orden de hacer una declaración complementaria de 4,4 millones de euros para regularizar su situación con Hacienda: "Desde Zarzuela le insistían en que no podía volver por el riesgo del coronavirus para su salud y por los frentes judiciales contra él. Por eso hizo lo que hizo".

Las fuentes consultadas por LPO añaden, además, que el rey emérito pasó "días complicados" tras recibir la vacuna de SinoPharm: "Es una de las que más contraindicaciones tiene y él las padeció". De hecho, recuerdan, "hubo rumores sobre un empeoramiento de su salud, y por eso se dejó fotografiar en un almuerzo junto a un famoso piloto de automovilismo para demostrar que estaba bien".

Después de superar los efectos adversos de la vacuna, su mensaje fue claro: "Ya puedo volver a España". Se lo dijo a sus hijas cuando le visitaron en Abu Dabi y también a algún empresario amigo de Galicia.

Desde Zarzuela, de hecho, se sospecha que la filtración sobre las vacunas para las infantas fue provocada por una indiscreción del propio Juan Carlos I en una de esas conversaciones con sus antiguos compañeros de regatas: "Debió decírselo a alguien en España y de ahí ha salido todo. Ni Elena, ni Cristina, ni los escoltas lo han contado", afirman fuentes próximas a Casa Real.

Desde Zarzuela se sospecha que la filtración sobre las vacunas para las infantas fue provocada por una indiscreción del propio Juan Carlos I en una de esas conversaciones con sus antiguos compañeros de regatas

La voluntad del rey emérito es clara, pero Felipe VI es consciente de que su padre no puede regresar a España en estos momentos. Y así se lo ha hecho llegar.

Personas muy cercanas a Zarzuela afirman a este diario que "es evidente que la polémica de su regularización fiscal y la vacunación de las infantas aleja todavía más su regreso". El problema, advierten, es que "cada vez es más difícil retenerlo".