Homenajearon a Menem en el Senado y propusieron un museo en Anillaco
El Senado brindó este miércoles un breve homenaje al ex presidente Carlos Menem, fallecido el 14 de febrero, a quien reemplazó en su banca el ahora ex ministro de Economía de La Rioja Ricardo Guerra, quien luego de ocupar la banca se convirtió en el único miembro del bloque oficialista en recordarlo. Su coterránea Clarita Vega sorprendió al pedirle a la hija Zulemita ceder la residencia de Anillaco para realizar un museo.
"Para los riojanos es un orgullo que un hombre nacido, criado y formado en nuestra tierra haya sido honrado con el voto popular como presidente de la República en dos ocasiones y en tres como gobernador de La Rioja, además de senador nacional", simplificó Guerra, que se sumará a la mayoría automática del Frente de Todos, una tranquilidad para sus autoridades que no siempre podían contar con Menem.
El ex presidente fue sumado al bloque en noviembre de 2019 por gestión del jefe José Mayans y tras su muerte la bancada emitió un comunicado de homenaje, en el que no hicieron alusión específica a su paso por la presidencia y destacaron su condición de preso político durante la dictadura militar. Antes de iniciar la sesión, Mayans se encargó de colocar la bandera a media asta, en señal de duelo.
También aludió a la detención de Menem la riojana Vega, una peronista que asumió aliada a los radicales integra un interbloque con el salteño Juan Carlos Romero y Carlos Reutemann, ambos cercanos al fallecido ex jefe de Estado. "Recuerdo cuando estaba en la plaza de La Roja celebrando la libertad. Su hermano Eduardo contaba que llevaría a Carlos a un psicólogo porque decía que iba a ser presidente".
Desde el palco no contuvo sus lágrimas Zulema, la hija de Menem, a quien Vega miró desde su banca y le pidió ceder "la rosadita", como se llama a la fastuosa casa que ocupaba en ciudad natal de Anillaco para hacer un museo en su memoria. "Es la misma que tenía un helipuerto tan criticado, que es similar a los que hay en la ruta 40", lo defendió.
Zulema asintió con la cabeza y la idea quedó en el aire, aunque no pareció disgustarle al riojano Julio Martínez, de la UCR, quien recordó desencantado como en la última década el nombre Menem quiso ser borrado de la ciudad. "Pero en 2017 fue candidato de todo el peronismo, porque era el que mejor medía", apuntó, quien ganó esos comicios.
"He sido un leal adversario. De chico iba a acompañar a mi papá para que nos gane Menem. Desde joven tuvo la convicción de que iba a ser presidente de la Nación y recorrió el país. Le llevaba 10 vueltas a Cafiero cuando había que votar. Le decía a su gente que garantice la fiscalización que ganaba. Y en lo que fue la elección de su vida, ganó", rememoró.
Adolfo Rodríguez Saá lo destacó como "un gran estadista y un hombre de diálogo. "Logró el Pacto de Olivos, se reconcilió con viejos adversarios y conmovió al peronismo cuando visitó a un viejo adversario como el almirante Isaac Rojas. Mostró aquel día la necesidad de que, más allá de las discrepancias, había que poner a la Argentina por encima de las pasiones". La sesión terminó con un minuto de silencio. Y la promesa de un museo.