Basterra gira a la izquierda y sacude el gabinete de Agricultura
El ministro de Agricultura, Luis Basterra, concretó este viernes la reforma de gabinete más profunda desde que está en el cargo. La modificación se anunció sobre el filo de la medianoche mediante un breve comunicado y en medio de la tormenta política de primera magnitud que provocó la salida del gobierno de Ginés González García.
Los cambios instrumentados por Basterra tienen coherencia política y trasuntan un giro del área hacia la visión del Instituto Patria del campo, tanto por los nombres que ingresan, como por los que salen.
La designación más significativa es la de Jorge Solmi como viceministro. Se trata de un histórico dirigente de Federación Agraria (FAA), que viene a reemplazar a Julián Echazarreta.
Solmi asume la Secretaría de Agricultura, un cargo político que actúa como una especie de brazo ejecutor del ministro. Los temas administrativos del Ministerio seguirán a cargo de la jefa de Gabinete, Diana Guillén.
El dirigente de Federación Agraria trabajó en los últimos años bajo el paraguas del Frente Renovador, donde tenía un rol importante en el equipo vinculado a los temas del campo de Sergio Massa, que empujó su nombramiento como Director del Fondo de Garantías Buenos Aires (FOGABA). El dirigente, oriundo de Pergamino, fue protagonista del conflicto con el kirchnerismo en 2008 por las retenciones móviles.
Solmi es abogado, especialista en semillas y hace gala de un perfil dialoguista y negociador. Hace varios años está enfrentado a la conducción de Federación Agraria y fue muy crítico de la política agropecuaria del macrismo entre 2015 y 2019.
En la Mesa de Enlace el cambio generó sorpresa. El diálogo con Echazarreta, un hombre de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), venía golpeado luego del cierre de exportaciones de maíz y del intento del Gobierno por aumentar las retenciones.
Solmi ya manifestó públicamente en varias oportunidades su posición a favor de la segmentación de retenciones, de una nueva Ley de Semillas y de Arrendamientos, entre otros temas, que se encasillan dentro de las consignas históricas de Federación Agraria.
Pero los cambios no se detienen ahí. También fue designado Luciano Zarich en el cargo de director de Control Comercial Agropecuario. Para que ingrese al gabinete le pidieron la renuncia a Marcelo Rossi, un dirigente con perfil técnico, con alto prestigio, que fue nombrado en 2016.
Zarich, oriundo de Arias, provincia de Córdoba, es contador público y ya se había desempeñado en la ex ONCCA envuelta en escándalos de corrupción entre 2007 y 2011 durante las gestiones de Ricardo Echegaray y el santacruceño Juan Manuel Campillo.
En el campo recuerdan que Zarich era el que administraba los famosos "ROEs" que funcionaban, en la práctica, como un instrumento para restringir y controlar discrecionalmente las exportaciones del sector. Además fue subinterventor de Vicentín.