El Gobierno logró bajar la tensión con Amnistía por la crisis con Insfrán
El Gobierno recibió a las autoridades de Amnistía Internacional para bajar la tensión que se desató por las denuncias de violaciones de Derechos Humanos en los centros de aislamiento por covid en Formosa.
La ONG había amenazado con una denuncia en organismos internacionales si el Gobierno no daba una respuesta, luego de que el secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, viajara a la provincia y minimizara las acusaciones contra el gobierno de Gildo Insfrán.
Tras reunirse con los representantes de Formosa el lunes por la noche, el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, junto a Pietragalla y la subsecretaria de Protección y Enlace Internacional de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, Andrea Pochak, se reunieron este martes con las autoridades de Amnistía Internacional Argentina, Mariela Belski, directora ejecutiva, y Paola García Rey, su directora adjunta.
En una reunión de trabajo cordial, tanto el gobierno como Amnistía Internacional coincidieron en la necesidad de profundizar el diálogo entre todos los actores involucrados, tanto en la situación de público conocimiento en la provincia de Formosa, como en cualquier otro caso vinculado a los Derechos Humanos en el marco de la pandemia.
Después de la presión de Amnistía, el Gobierno intenta control de daños sobre el caso Insfrán
Tras la visita de la semana pasada del secretario de Derechos Humanos a dicha provincia, donde se entrevistó con las autoridades locales, las organizaciones sociales, dirigentes y referentes de la oposición política y representantes de la sociedad civil, el gobierno nacional profundiza la estrategia de "escuchar a todos".
"Amnistía Internacional considera como un paso positivo la posibilidad de conversar y llevar muestras preocupaciones, fundadas en denuncias de afectados, para avanzar y lograr revertir esta situación. Mantenemos nuestro compromiso de seguir documentando la situación en Formosa y garantizar que las respuestas a la pandemia sean siempre respetuosas de los derechos humanos", sostuvo la directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, Mariela Belski.
El gobierno nacional compartió los resultados preliminares del informe que realizó la Secretaría de Derechos Humanos, y en paralelo, la organización internacional agregó información que elaboró sobre la situación en la provincia.
Asímismo, Amnistía Internacional también transmitió su posición sobre la situación de Formosa, sobre las denuncias y testimonios documentados e insistió sobre la necesidad de garantizar los derechos de las personas y de que el Estado nacional siga monitoreando la situación de cerca para asegurar que las medidas implementadas respeten los derechos humanos.
Tras bajar la temperatura con Amnistía, ahora la tensión escaló con otra ONG internacional. El titular de Human Rights Watch, José Miguel Vicanco, cruzó a Cafiero por Twitter. "Ningún gobierno ni partido político es dueño de los DDHH y todos deberían estar abiertos a las críticas, en especial por graves abusos como los que se denuncian en Formosa", dijo Vivanco.