Córdoba en default: viviremos para pagar este fin de ciclo

El monstruoso endeudamiento del gobierno de Schiaretti tuvo fines electoralistas y de muy corto plazo: ejecutar obra pública para ganar elecciones.

Con el vencimiento del mes de gracia otorgado por los acreedores, que operó este sábado 9 de enero, y de no mediar otras negociaciones, la provincia de Córdoba ingresa desde este lunes defalut o cesación de pagos, consecuencia de la delicada situación a la que llegamos decididamente por mala praxis financiera. No nos equivoquemos. El monstruoso endeudamiento en moneda extranjera del gobierno de Juan Schiaretti tuvo fines electoralistas y de muy corto plazo: ejecutar obra pública para ganar elecciones y diferir el pago de costos a futuros gobiernos.

No hablo de la obra pública necesaria para los servicios como los gasoductos troncales o la infraestructura vial, sino de la obra faraónica no necesaria, como la construcción del Panal y del nuevo edificio de la Legislatura provincial. Hablo de las prioridades y de las condiciones económico-financieras en las cuales se adquirieron las obligaciones.

Los acreedores rechazaron las cinco propuestas elevadas por el gobierno provincial porque entienden que Córdoba tiene maneras de cumplir con los acuerdos. En otras palabras, saben que el presupuesto 2021 fue un dibujo, que hay fondos que se están utilizando en otras cuestiones menos relevantes y que diferir los plazos de los tres bonos que se negocian es "patearle" el problema al gobierno que sigue.

Acá algunas cuestiones técnicas que explican lo que digo. Analizando comparativamente las condiciones de emisión de deuda, las ofertas rechazadas y la última oferta, apreciamos lo siguiente:

1. Condiciones originales de la emisión de deuda en moneda extranjera (Tasas: 7,125%, 7,5%%, 7,125% para el PDCAR21, PDCAR24 y PDCAR27 respectivamente).

2. Oferta del Gobierno de la Provincial rechazada por el grupo Ad Hoc (Tasas: 1,125%, 1,125%, 5,125% para el PDCAR21, PDCAR24 y PDCAR27 respectivamente); sobre la base que entendemos que fue elaborado el presupuesto 2021.

3. Última oferta del Gobierno de la Provincia de Córdoba al 5 de enero de 2021 (Tasas: 2,75%, 4,75%, 6,75% para el PDCAR21, PDCAR24 y PDCAR27 respectivamente).

El análisis se realizó con datos oficiales publicados por el gobierno de la provincia de Córdoba: el Presupuesto 2021, datos del sitio web del Ministerio de Finanzas de la provincia de Córdoba y las modificaciones de los términos y condiciones en cada una de las ofertas de los títulos de deuda admisibles a la restructuración. Todos los valores están expresados en dólares.

Se observa que de los 839 millones de dólares que la provincia debe pagar en concepto de intereses para los tres bonos en restructuración, -ya se saldaron 456 millones de dólares al día de la fecha (diciembre 2020)-, esto representa el 54% del total, restando unos 382 millones de dólares. El costo financiero de una restructuración exitosa se debe analizar sobre la base de lo ya erogado en concepto de pago de intereses.

La última oferta realizada, la quinta en total por parte del gobierno de la provincia de Córdoba, planteó la posibilidad de extender el plazo de pago de los servicios de deuda y sumar 632 millones de dólares adicionales a los 456 millones de dólares ya erogados, totalizando 1.089 millones de dólares.

Flujo de pago sobre el total de los 3 instrumentos. Comparativa entre situación original y última oferta realizada por el Gobierno de Córdoba.

De los 120 millones de dólares de los servicios de intereses correspondiente a 2021 en la situación de deuda original, 25 millones de dólares aún no fueron saldados, que corresponden al pago de los servicios de deuda del PDCA21, y por el cuál la provincia puede entra en default desde 9 de enero.

Si se confirma el default este lunes, ingresaremos a un universo de imponderables consecuencias, a partir de las restricciones financieras que impactarán en el tejido productivo de nuestra provincia y atarán de manos a futuros gobiernos, obligados a pagar lo heredado, sin acceso al mercado de capitales y al dólar billete. Pero además, y es el dato clave de nuestro presente, en línea con la estrategia de negociación de la deuda del binomio presidencial, nos volverán absolutamente dependientes del gobierno nacional, es decir, rehenes políticos. Viviremos para pagar este fin de ciclo político.