Biden se queda con Arizona y fuerza a Trump a retener todo el cinturón de óxido
Tras varias horas de zozobra, la campaña de Joe Biden comienza a respirar un poco más tranquila, al capturar al estado de Arizona, histórico bastión republicano, y fuerza al presidente Donald Trump a tener que retener el "cinturón de óxido" que en las pasadas elecciones fue clave para su sorpresiva victoria sobre Hillary Clinton.
Los 11 votos electorales de Arizona, estado que sólo había ido a un demócrata una vez desde 1952, en la reelección de Bill Clinton en 1996, llegan en el momento justo para al ex vicepresidente de Obama, quien pese a los sondeos que lo ubicaban aventajando al republicano no pude quedarse ni con Texas ni con Florida, dos estados que de ganarlos hubiesen significado el fin de las ambiciones reeleccionistas de Trump.
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Probablemente el apoyo que cosechó Biden de Cindy McCain, la viuda del ex candidato republicano y senador John McCain, la figura más popular del estado, fue clave para que Biden capturase Arizona, que en los últimos días había sido bombardeada por publicidad por ambos candidatos, que sabían de su importancia.
Kamala Harrys y Cindy McCain
Además, Biden comienza a acortar la diferencia en Georgia, un estado que tanto Romney como Trump habían ganado cómodamente en los comicios previos, y que en estas elecciones los demócratas se habían puesto como objetivo recuperar con el apoyo del voto afroamericano.
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Si bien el republicano aún mantiene allí una ventaja, se espera que al empezar a contar los votos de Atlanta, un área metropolitana que votará masivamente a favor de Biden, el demócrata podría quedarse con los 16 votos electoral del estado.
Ahora, el republicano está obligado a repetir su victoria en el "cinturón de óxido", los 3 estados (Michigan, Pennsylvania y Wisconsin), ex cunas industrialistas fuertemente golpeadas por el cierre de industrias manufactureras, que capturó en el 2016 gracias a su retórica de traer de nuevo los puestos laborales que habían evaporado.