Kicillof ya giró más $11.000 millones al sistema de Salud y el cuello de botella es la falta de médicos
A más de cuatro meses del primer caso de coronavirus, el gobierno de Axel Kicillof busca poner a punto una estructura sanitaria que permita contener la pandemia. El desafío es que la velocidad del virus no sobrepase la logística.
Al momento, incluso los intendentes más críticos elogian el trabajo del gobierno para hacer frente al virus. El gobierno giró a los municipios unos $11.481 millones para el sistema de Salud y varios jefes municipales destacan la gestión sobre los insumos hospitalarios y los costosos respiradores.
En poco más de tres meses se reactivaron 19 obras en los hospitales provinciales y se terminaron 18 guardias de hospitales. Además se crearon 36 centros de atención primaria. Además, se dotó a los hospitales con más de 740 camas UTI y 500 de cuidados intermedios.
En cuanto a insumos llegaron 30 vuelos y un barco con millones de barbijos. También guantes, camisolines, antiparras y equipos de protección personal.
Desde el inicio de la emergencia sanitaria, la provincia lleva entregados más de 1.000 respiradores para el sistema público en todos los distritos, entre otros equipamientos de alta complejidad como monitores, bombas de infusión y camas de terapia intensiva.
La semana pasada llegó al puerto de Dock Sud el buque Croatia con 1.700.000 barbijos tricapa, 4.000.000 de guantes y 181.800 barbijos N95. Se trata del primer barco de cinco que llegarán desde Shangai con un total de 55 contenedores con suministros.
Ginés González García y Axel Kicillof en una entrega de respiradores.
El 14 de julio llegarán otros dos barcos con 28 contenedores, mientras que para agosto se prevé el arribo de otras dos embarcaciones con los 23 contenedores restantes. Todos estos elementos importados de protección se suman a los que ya se trajeron en los 31 vuelos que también formaron parte de la misma Operación.
Los intendentes no ocultan su conformidad por el trabajo del gobierno. Son afirmaciones importantes toda vez que en los primeros meses de gestión hubo momentos de roces y fricciones entre los jefes municipales y los despachos de La Plata.
Un análisis que hacen desde los despachos municipales del Conurbano es que muchos logros de Kicillof quedan tapados por un enfrentamiento constante con Horacio Rodríguez Larreta y una estrategia de comunicación de choque, que a fin de cuentas no resulta del todo eficaz.
La única luz de alerta que encienden los intendentes tiene que ver con la falta de médicos y profesionales de la salud, aunque atribuyen ese problema a las complejas normas de contratación del Estado.
Fuentes del gobierno admiten el problema aunque explican que se están haciendo contrataciones. "La contratación de personal es más lenta, es más fácil llevar camas que contratar personal", explican.
Desde La Plata explican además que se hizo un trabajo importante en la búsqueda de casos sospechosos en el territorio. Eso -dicen- evitó brotes importantes en el Conurbano, un área con una conformación compleja donde sólo se registraron brotes puntuales en Quilmes, Berisso y en menor medida en Tigre.
También hubo avances importantes en cuestiones administrativas como la unificación de los sistemas sanitarios de Salud anclados en el territorio bonaerense. Sucede que en la provincia convivían hospitales nacionales, provinciales y hasta municipales. Todos convivían de manera desarticulada al punto que el gobierno provincial no podía saber con certeza con cuántas camas contaba.
En las últimas semanas, la provincia de Buenos Aires superó a CABA en cantidad de contagios diarios y totales. La provincia tiene 43.200 casos y la Ciudad 33.300. Sin embargo, desde el gobierno piden mirar la cantidad de habitantes.
Kicillof sostiene que en la Ciudad de Buenos Aires es donde más contagios se producen cada 100 mil habitantes. El Gobernador suele explicar que existe una diferencia a escala. La provincia tiene 17 millones de habitantes y 13 millones están en el Conurbano, mientras que la Ciudad tiene 3 millones de habitantes.