México

Una energética española cancela una inversión de USD 1.200 millones en México por los ataques de AMLO

"México no es tierra de conquista, no vengan a saquearnos", había dicho el presidente.

La española Iberdrola frena sus inversiones en México tras la hostilidad de su presidente, Andrés Manuel López Obrador. El dirigente, que censura habitualmente las incursiones empresariales de empresas españolas como OHL en el país latinoamericano, ha criticado fuertemente a la energética, que ha paralizado una inversión de 1.200 millones de dólares en la región en protesta por la estrategia del Gobierno.

Iberdrola tenía encargado el proyecto para crear una planta eléctrica en Tuxpan, Veracruz, pero finalmente declinó emprenderlo por discrepancias en la política energética del país y después de los múltiples desplantes de AMLO.

Esta mañana de jueves, López Obrador reveló que recibió una carta de Iberdrola pidiéndoles un encuentro, pero el presidente ha declinado la reunión y les ha derivado a la Secretaría de Energía, una muestra de su posición al empresariado extranjero. Además, ha restado veracidad a la renuncia de la empresa española en el país, alegando que la compañía no le había informado de su renuncia en esa misiva. 

"No hay ninguna notificación en el sentido de una cancelación. Me hubieran dicho que ante las diferencias que tenemos, que son públicas, habían cancelado y no es lo que me expresan", aseguró, contradiciendo así al gobernador de Veracruz que hizo oficial el anuncio este miércoles. En sentido contrario, señaló que Iberdrola estaba dispuesta a llevar acuerdos: "Me expresan que tienen alrededor de 26 plantas termoeléctricas en el país y que tienen la voluntad de seguir invirtiendo en México y también la disposición de llegar a acuerdos con el gobierno".

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Más adelante, mandó un duro mensaje a la compañía: "Que se entienda bien, que ese escuche fuerte y lejos: México no es tierra de conquista. No van a venir a saquearnos, se acabó esto. Tenemos que cuidar el patrimonio de los mexicanos".

Los desacuerdos con el Gobierno mexicano de las empresas españolas se hacen cada vez más evidentes, con señalamientos de su máximo representante, que desde el Palacio Nacional les acusa de haber sido beneficiadas por los anteriores presidentes mexicanos como Felipe Calderón o Enrique Peña Nieto. Una crítica que no es nueva pero que comienza a hacer mella en las compañías allí asentadas.

"Tenían el gran negocio de cobrar a precios elevadísimos la energía eléctrica, se le tenían que pagar hasta subsidios. Estaban en contubernio con las autoridades para destruir a la Comisión Federal Eléctrico", criticó en una ocasión al referirse a empresas españolas, antes de señalar directamente a Iberdrola, a quien acusó de lanzar una campaña en su contra. "Tengo información", señaló hace unos días en una de sus conferencias matutinas. "Nada más que encubiertos, porque el conservadurismo tiene dos características: es muy corrupto e hipócrita, tengo que decirlo que el pueblo se entere y que el pueblo lo sepa".

El mandatario suele recordar que esta empresa fue de las favoritas durante la administración de Felipe Calderón, una relación que tampoco deja de señalar pues el expresidente pasó a las filas del Consejo de Administración de una de sus filiales en Estados Unidos.

Los cuestionamientos no han parado desde la llegada de López Obrador, y han supuesto una ruptura de la llamada "luna de miel" con la que arrancó el Gobierno y el sector empresarial. A pesar de ese deterioro, López Obrador persiste en su discurso de que está poniendo orden en un sector plagado de corrupción y que se dedicó a favorecer a las empresas privadas, minando a las estatales como Pemex y CFE.