Deuda externa

Loretta Preska, la nueva Griesa que amenaza a Guzmán

Sin aceptación de la propuesta, el 22 de mayo es el último día para evitar el default y que Loretta Preska, la sucesora del juez Griesa, se convierta en cabeza de los titulares de los diarios argentinos.

Comenzó la cuenta regresiva al 22 de mayo. Los tropiezos de Martín Guzmán ponen a la Argentina en una débil posición en la mesa con los acreedores. En la teoría de las negociaciones, siempre quien está apurado para cerrar un acuerdo es quien más sale perdiendo. Por ello fue un error el no haber pagado en tiempo y forma los Bonos Globales 2021, 2026 y 2046 que sumaban 503 millones de dólares en la fecha de vencimiento original, el 22 de abril. El ministro no quiso, no pudo, no supo y se ingresó en esta carrera contrarreloj de los 30 días adicionales que otorgan los prospectos de emisión para evitar el default.

En el ínterin el Banco Central perdió reservas por bastante más que esos 503 millones de dólares. Ese probable default activó el retiro de dólares de los bancos por parte de algunos ahorristas. A principios de mayo fueron cerca de 100 millones de dólares diarios. El total de depósitos en dólares en el sistema financiero asciende a 17.000 millones de dólares aproximadamente.

En la teoría de las negociaciones, siempre quien está apurado para cerrar un acuerdo es quien más sale perdiendo. Por ello fue un error el no haber pagado en tiempo y forma los Bonos Globales 2021, 2026 y 2046 que sumaban 503 millones de dólares en la fecha de vencimiento original, el 22 de abril.

Se multiplican los fantasmas ante la posibilidad de que la Argentina llegue a su noveno default en la historia. De los nueve, sería el más infantil. El total de la deuda emitida bajo legislación extranjera es poco más de  60.000 millones de dólares, sólo 15% del PBI. El resto de la deuda emitida bajo legislación argentina está a tiro de decreto y quienes en su momento invirtieron en esos papeles están sufriendo la diferencia calidad en el paraguas judicial entre los tribunales porteños y la Corte del Distrito Sur de Nueva York.

La persona que se va a popularizar si la Argentina entra en default el 22 de mayo es Loretta Preska. Es la nueva Thomas Griesa en esta novena temporada del default. Fue nombrada por George Bush en 1992 y adquirió senior status en 2017.Ya tuvo varias causas importantes a su cargo por lo que el default de la Argentina no le generará ninguna presión. Una de ellas fue en 2006, la de Mastercard contra FIFA porque cambió de sponsor a VISA. Mastercard tuvo contrato en los 16 años anteriores y el derecho a superar ofertas en los años siguientes. La FIFA le daba información a VISA en la negociación. Falló a favor de Mastercard. También falló a favor de Bloomberg cuando la agencia de noticias demandó a la Reserva Federal de Nueva York por no brindar información sobre las instituciones financieras beneficiarias del paquete de rescate en la crisis de 2008 por 1,2 billones de dólares. Preska también tiene la causa contra la Argentina por la expropiación de YPF activada por el fondo Burford (detrás de este fondo hay rastros de empresarios argentinos).

Loretta Preska, la jueza de Nueva York que sucedió a Griesa.

Una cuestión que no tuvo la difusión adecuada en la última semana fue el no pago de la Argentina al Club de París. Fueron en vano las llamadas de Alberto Fernández a Angela Merkel, a Emmanuel Macron y a Giuseppe Conte para lograr una renegociación de esa deuda. El Club de París le pidió a Martín Guzmán que debe contar con un programa con el FMI para lograr esa renegociación. El impacto de este default es más político que financiero. La Argentina se queda sin financiamiento para las empresas locales de la banca de fomento internacional. No lo iba a haber igual. Pero en cada organismo internacional la postura de los países acreedores se hará sentir a la hora de votar desembolsos.

Argentina defaulteó la última cuota del acuerdo de Kicillof con el Club de Paris

Los fondos de inversión acreedores ya están organizados. La lentitud de Guzmán para lanzar la oferta hizo que las partes se unan. Larry Fink de BlackRock solicitó la mediación del Tesoro norteamericano en la disputa hace dos semanas. Hubo un llamado de Washington al Ministerio de Economía. El resultado: al desagrado de BlackRock se suma ahora el del propio Tesoro norteamericano.

Larry Fink de BlackRock solicitó la mediación del Tesoro norteamericano en la disputa hace dos semanas. Hubo un llamado de Washington al Ministerio de Economía. El resultado: al desagrado de BlackRock se suma ahora el del propio Tesoro norteamericano.

Larry Fink no es Paul Singer, el más célebre entre los fondos buitres. Fink es el cofundador y CEO del mayor fondo de inversión del planeta con más de 600 mil millones de dólares en activos a su cargo. Informalmente integra un consejo asesor de Donald Trump en términos estratégicos y económicos. En BlackRock invierten ahorristas norteamericanos y de todo el mundo. Es un intermediario. No es un fondo buitre. La Argentina así se va quedando sin aliados en el contexto financiero internacional. Joseph Stiglitz y Jeffrey Sachs, los economistas pro Argentina en EE.UU., no conmueven. El Fondo Monetario ya comenzó su fase de alejamiento al señalar su vocero Gerry Rice, que el organismo "no está involucrado en la negociación entre Argentina y sus acreedores".

Martín Guzmán cuenta con sólido apoyo de Cristina Fernández. Y por ende de Alberto Fernández. Se estudian mejoras en las propuestas. Mueven ahora los acreedores. Que haya negociación hizo recuperar terreno a las acciones y bonos argentinos. Pero aún falta. En valor presente neto, la oferta de Guzmán es de 35 dólares y la que reclaman bonistas es de 50 dólares. Hay espacio para que haya un entendimiento corriendo tasa de interés, duración de la cláusula RUFO, intereses devengados hasta ahora, y quita de capital.

El problema es que el margen de tiempo es escaso. Puede ser que la Argentina, si las negociaciones están avanzadas, se vea obligada a pagar los 503 millones de dólares para seguir adelante. Alberto Fernández es el primer interesado en que no haya default. Sabe que la economía argentina no despegará y menos antes de las elecciones legislativas de 2021. Al fin y al cabo, ello será el tema central dentro de seis meses. Ya hay voces internas en el PJ que esmerilan a Guzmán: "Trajimos a un economista de EE.UU. para que nos lleve al default con el Club de París y todos los bonistas; para eso nos hubiéramos quedado con Rodríguez Saá".

Una crisis que no se vio en siglos

Reapareció el ejecutivo de banca privada que se escuda detrás del seudónimo del "oso". En su informe distribuido horas atrás a clientes, plantea los siguientes puntos:

1) Acabamos de conocer los números de desempleo en EE.UU.; fue una cifra récord de 14,7% contra el 16% esperado por analistas; el desempleo temporario pasó del 26,5% al 80%; esto es lo que más rápido se daría vuelta una vez que reabran la economía.

2) En Irlanda el índice llega al 28% y en Inglaterra esperan una caída del 30% de su PBI en este trimestre y del 14% en el año, el peor registro desde 1706.

3) A pesar de todo esto parece que la FED y los bancos centrales han hecho su trabajo inyectando liquidez y emitiendo bonos a diestra y siniestra; esto ha permitido que el S&P que tocó 2.191 el 23 de marzo hoy esté coqueteando con pasar los 3.000 puntos y que el Nasdaq ya esté en positivo en el año.

4) Por la incertidumbre de las segundas olas y efectos colaterales de lo que hemos visto sería prudente tomar una actitud conservadora para adelante y esperar algún tipo de corrección en los próximos meses seguramente como ha ocurrido en el pasado con otras crisis.

5) En la Argentina todos los involucrados en la negociación por la deuda tienen claro que el peor escenario es el default pero parece que Guzmán quiere imponer condiciones que son inaceptables por la sencilla razón que lo importante no es la tasa promedio a la que se refinancia la deuda sino la tasa que saldría a pagar al mercado una vez que termine este proceso.

6) Perú a 10 años colocó al 2,5% y Brasil esta en el 4,5%; quiere decir que Argentina con viento a favor podría colocar al 6% mientras que está pidiendo no pagar durante 3 años y arrancar con 0,5% de cupón de intereses y un promedio de tasa de 2,5% a lo largo de 30 años; somos el peor de la clase y queremos pagar como el mejor.

7) La demora en la presentación de una propuesta significó que se pagaron 3.000 millones de dólares en vencimientos de los cuales 700 millones fueron de bonos bajo ley extranjera; el tiempo perdido ha costado mucha plata además de lo que ha sucedido con la brecha cambiaria que de algún a manera se podría aliviar si llegan a un acuerdo en los próximos.