Deuda externa

Los bonistas del canje de 2010 rechazan la propuesta de Guzmán: "Cristina prometió que se nos iba a pagar en tiempo y en forma"

El análisis técnico de los acreedores expone que la propuesta del ministro implica que el PBI per cápita argentino se reduzca hasta parecerse al de Paraguay: "¿Esperan que nos lo creamos?"

Un grupo de fondos acreedores de la deuda argentina advirtió este lunes que no van a aceptar la propuesta de Guzmán por considerarla "profundamente defectuosa" y pidió a los demás acreedores que también la rechazaran. Se trata del Grupo de Acreedores de Canje ("Exchange Bondholders Group"), quienes hacen hincapié en que son acreedores de larga data, a diferencia de lo que ellos llaman "los bonos-Macri".

En un seminario virtual titulado "A los bonistas les puede ir mejor que con la oferta unilateral de canje argentina" ("Bondholders Can Do Better Than Argentina's Unilateral Exchange Offer"), los representantes de este grupo de 18 fondos acreedores remarcaron que la propuesta de Guzmán "es confiscatoria", contiene defectos técnicos en su formulación y degrada los derechos obtenidos en el canje 2005-2010. En este sentido, uno de los representantes recordó que en 2010 "se cedieron beneficios económicos a cambio de protección legal" y que aceptaron ese perjuicio económico porque confiaron en que era la última vez que el país incumplía: "La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner prometió que era la última vez y que se nos iba pagar en tiempo y en forma".

Estos bonistas - entre los que figuran HBK Investments, Monarch Alternative Capital LP, Pharo Management (UK) LLP, Redwood Capital Management, LLC y VR Capital Group- aseguran que en sus manos están casi 4.000 millones de dólares de deuda argentina del Canje de 2005-2010 (más del 15% de los bonos PAR y DISCO) y por lo tanto poseen la cantidad suficiente de estos títulos como para bloquear la posibilidad de que el ministro consiga las mayorías necesarias para que la propuesta de Guzmán permita cerrar un nuevo canje.

Como estos bonos representan el 35% del total de la deuda en moneda extranjera, su negativa supone que más de dos tercios de la deuda no podrá llegar a la cantidad mínima de acreedores necesaria para que el resto acepte la propuesta de Guzmán.

En este sentido, los representantes de estos fondos subrayan que no son fondos buitre, que en el pasado ya se sentaron a negociar con la Argentina y ya aceptaron fuertes pérdidas -lo que esperan que les sea reconocido en un nueva propuesta de Guzmán- y que están dispuestos a negociar. "Queremos evitar ir a juicio" sostuvo el abogado del estudio Quinn Emanuel Urquhart and Sullivan, Dennis Hranitzky.

"¿Esperan que nos creamos que Argentina va a rumbo a Paraguay?"

Entre las cuestiones que, en su opinión, hacen "profundamente defectuosa" a la propuesta, los representantes del Grupo señalaron que la quita que propone Guzmán subestima la capacidad de pago de la Argentina. En este sentido, consideraron que es muy superior a la que consideró el Fondo Monetario Internacional en cualquier escenario futuro.

A la vez, remarcaron que si el PBI argentino crece, la capacidad de pago se incrementa. Mientras que la propuesta del FMI supone que el PBI per cápita argentino va a evolucionar para converger en niveles similares al de Brasil, la de Guzmán da a entender que el PBI per cápita va a pasar a ser similar al de Paraguay. "Nos quieren hacer creer que los argentinos están trabajando para convertirse en Paraguay", ironizó el analista del fondo Pharo, Thomas Moatti.

En este sentido, los acreedores señalaron que es precisamente sobre el rumbo de la economía argentina donde no hay acuerdo con el Gobierno y que "lo natural sería agregar un instrumento contingente, no necesariamente un cupón PBI, pero tal vez un ‘coupon boost' o una aceleración de los intereses, pero la propuesta de Guzmán no tiene tal instrumento", dijo al tiempo que recordó que el equipo Alberto Fernández tampoco presentó un plan económico de reformas estructurales que sirva de incentivo para las inversiones.

A su vez, señalaron que la propuesta de Guzmán no fundamenta los motivos por los cuales no se puede pagar nada durante tres años y que castiga a los que tienen instrumentos en euros por remunerarlos en promedio con un 1% anual menos, diferencia que no se sostiene al ver la diferencia entre las curvas de interés en dólares y en euros y que a esos bonistas no se les permite optar por pasarse a deuda en dólares.

Tras el rechazo de los fondos, Guzmán dice que está dispuesto a escuchar otra propuesta

Además, aseguraron que no  se les da ningún incentivo a cambio de la reducción en sus derechos como acreedores. Por ejemplo, conservando los bonos actuales tienen hasta 5 años para reclamar judicialmente el incumplimiento del pago de intereses y hasta 10 para el impago de capital, mientras que las cláusulas de 2016, les dan 2 y 5 años respectivamente.  

"Los que ya aceptaron pueden retirarse antes del 8 de mayo. Si aceptás y la Argentina sostiene la oferta, porque podría retirarla, tus bonos están cancelados y perdés los derechos de los bonos del Canje y puede ser que fuerces a otros bonistas que la rechazaron a que les canjeen sus bonos, y si luego hay una mejor oferta no podés reclamar; si no aceptás, conservás la protección legal como acreedor, a menos que una mayoría de los bonistas acepte y te los canjeen", resumieron. "Lo mejor que podés hacer es rechazar esta propuesta", aseguraron en el webinar para más de 400 inversores.