Brasil

Bolsonaro logró echar a su ministro de salud y hubo cacerolazos

El médico y empresario Nelson Teich anunció al asumir el cargo su "alineamiento" con Bolsonaro y el resto del gabinete.

El próximo tramo de la presidencia de Jair Bolsonaro podrá ser más duro que lo imaginado. Le toca ahora atravesar uno de los peores momentos de la pandemia. Es que tal como se admite círculos oficiales, la "sub notificación" dejaría afuera de los cómputos unos 100.000 brasileños contagiados. Este es el escenario que le tocará enfrentar al presidente, sin tener nadie a sus espaldas en quién descargar responsabilidades.

Este miércoles se concretó el despido del ahora ex ministro de Salud Luiz Henrique Mandetta, reemplazado por el médico y empresario Nelson Teich. Y en el momento del anuncio formal, cuando el jefe de Estado se presentó con el nuevo funcionario, estallaron en las grandes ciudades fuertes cacerolazos: San Pablo, Río de Janeiro y Brasilia, son algunas de ellas.

El mandatario supo, a través de sus propias redes sociales, que al "deshacerse" de Mandetta contrariaba no solo a opositores sino también importantes segmentos de sus seguidores. En su declaración le intentó imprimir un tono conciliador: "Este fue un divorcio consensuado", sugirió en relación a la destitución del ex funcionario; un médico y político que contó, según las encuestas, con 75% de apoyo de la población.

En medio del pico de la pandemia, Bolsonaro vuelve a chocar con su ministro de Salud

Su flamante colaborador Teich se mostró dispuesto a seguir fielmente las instrucciones de su jefe en el combate al Coronavirus. Y todo indica que el presidente puede contar con su incondicionalidad, al menos en lo formal. "Quiero dejar claro que existe un alineamiento completo con el presidente y todo el equipo ministerial", declaró.

Con el presidente se conocen de hace tiempo. Más precisamente de la época en que el médico oncólogo, asesoró al por entonces candidato a presidente durante la campaña de 2018. Teich, con todo, no es ningún improvisado: además de su especialidad en cáncer, tiene un doctorado en la Universidad de York (Inglaterra) en ciencias y economía de la salud. Luego de adquirir esa formación académica, el experto optó por el mundo de los negocios. Fue fundador y presidente del Grupo Clínicas Oncológicas, y es socio en la actualidad de Teich Health Care, consultora de servicios médicos. Como parte de ese universo, mantiene una relación impecable con los dueños de sanatorios y prepagas.

El nuevo miembro del equipo ministerial no comulgó, hasta ahora, con las posiciones de Bolsonaro. De hecho, Teich defendió hasta comienzos de abril el "aislamiento horizontal", es decir, vigente para todas las edades. El presidente, en cambio, que se ha mostrado más preocupado por la economía ha sostenido que el aislamiento debe ser vertical, o sea apenas para las franjas vulnerables de la población: los mayores de 60 años y los minusválidos.

Durante la presentación del nuevo funcionario, Bolsonaro dijo que se había dirigido a todos sus ministros para hablar de "vida y empleo". Pero el recién llegado al Planalto mostró otro enfoque: "Discutir ahora salud o economía es malo. En verdad no compiten entre sí, son complementarias. Si se polariza comienza a tratar a las personas versus el dinero; empleo versus personas enfermas. Nada de eso es correcto".

Tampoco se mostro partidario de utilizar nuevas drogas en forma general, sino "dentro de proyectos que funcionen como investigación, porque es lo que va a permitir obtener el mayor número de informaciones en el menor tiempo posible. Eso ayuda a entender la diferencia entre personas, pacientes y sociedad".

 El general Braga Neto y el Congreso impiden a Bolsonaro echar al ministro de Salud

La salida de Mandetta, que fue diputado federal por el partido Demócratas (de centroderecha), provocó un revuelo en el mundo político de Brasilia. El presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, dijo que el ex ministro "deja un legado, una estructura, para que Brasil, el gobierno federal y los gobiernos de los estados y municipios, tengan condiciones de atender a la población contagiada".

El gobernador de San Pablo, Joao Doria, subrayó: "La salida de Mandetta es una pérdida para Brasil. Agradezco su contribución y apoyo al estado de San Pablo en el combate a la pandemia. Le deseo éxito al nuevo ministro Teich y espero que siga los procedimientos técnicos recomendados por la Organización Mundial de la Salud".