Municipios portuarios reclaman que los buques completen la cuarentena antes del descenso de la tripulación
Las tres localidades del cordón industrial del Gran Rosario concentran las principales terminales agroexportadoras y por ende, un intenso peregrinar de marineros de todo el mundo que en medio de la pandemia puso en alerta a los alcaldes.
Por tal motivo, solicitaron a Nación que garantice los controles sanitarios de las tripulaciones previo desembarco a tierra y que los barcos que arriben de países limítrofes, con pocos días de viaje, cumplimenten la cuarentena en el buque antes de bajar a tierra.
La demora puede generar pérdidas millonarias ya que el costo diario en dólares de un buque amarrado es inmenso. Sin embargo, los jefes municipales alegaron la defensa de la salud de su población para tomar la decisión.
En diálogo con LPO, el intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, explicó que la medida afecta a solo el 2,5% de los barcos, o sea, aquellos que navegan menos de 14 días. "Proponemos que en Recalada les hagan cumplir los días que faltan para cumplimentar los 14 días y entonces nos garantizamos cero riesgo", sostuvo.
Además, Raimundo expresó que todos los gremios del sector pidieron que se tomen medidas urgentes porque ya están teniendo deserciones de trabajadores por el temor a contagiarse. "Por eso nosotros avalamos esta medida", admitió el intendente quien afirmó que solo afecta a 3 o 4 barcos por mes, los que provienen de Brasil o Chile ya que los que vienen de punto más lejanos, navegan hasta 30 días hasta llegar a los puertos santafesinos, por lo tanto, hacen la cuarentena en altamar.
"Nosotros lo que pedimos de manera inmediata que Nación se haga eco y cumpla la resolución presidencial de Emergencia Sanitaria acerca de pandemia mundial Covid 19 que estamos atravesando y a los buques provenientes de países considerados de alto riesgo de contagio, cuya navegación sea inferior a 14 días, solicitamos respetar la cuarentena", plantea un escrito elevado a la subsecretaria de Calidad, Regulación y Fiscalización del Ministerio de Salud de la Nación, Judit Bazán.
El intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, encabezando la reunión con autoridades nacionales y gremiales
Previamente, en una reunión en la que participaron los jefes municipales junto a autoridades de Prefectura, gremios del sector, funcionarios provinciales, Sanidad de Frontera y Migraciones, se decidió el área de Sanidad deje de emitir short pass a tripulantes de buques. De este modo no habrá más embarcados extranjeros en las calles de San Lorenzo y de la región.
El reclamo venía siendo formulado por el Foro de Localidades Portuarias del cual ambas ciudades forman parte. Además se plantearon medidas de seguridad para los trabajadores portuarios.
Según explicó Raimundo, los mandatarios lograron la suspensión provisoria de los llamados "short pass", permisos provisorios que tenían los embarcados para descender de los buques y circular por la región.
Además, los organismos nacionales se comprometieron a revisar y controlar a las tripulaciones antes del ascenso a los buques de los trabajadores argentinos como los prácticos y estibadores cuando abordan los barcos para realizar sus tareas.
Cuando las embarcaciones extranjeras llegan a la Hidrovía, los prácticos que conocen el canal y el ingreso a los puertos, toman el comando de la unidad. Por tal motivo, desde los sindicatos también se comprometieron con la solicitud de mayores controles.
"Este es un reclamo que veníamos haciendo desde las localidades portuarias porque veíamos con preocupación la circulación de embarcados de distintas nacionalidades en momentos en que se habla de evitar el contacto", dijo el mandatario pero nunca se establecieron los controles correspondientes.