México

López Obrador quiere rifar el avión presidencial

El presidente mexicano intenta dar una imagen de austeridad como contracara de los excesos de anteriores gobiernos. Pero no encuentra comprador.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó que es "muy probable" que rife el avión presidencial, valuado en 130 millones de dólares, ante la imposibilidad de encontrar un comprador. 

La nave, adquirida durante el gobierno de Felipe Calderón pero utilizada por Enrique Peña Nieto, es considerada por AMLO como un símbolo de los excesos y privilegios de las anteriores administraciones, por lo que busca desprenderse para dar una imagen de austeridad.

"Es muy probable, en esta semana se decide y se va a rifar el avión presidencial. Esta semana se decide", dijo el tabasqueño. Las posibilidades eran venderlo, rentarlo o rifarlo a través de la Lotería Nacional, la opción que tomó fuerza el fin de semana. 

"Todo lo que se obtenga por la rifa, por la venta de ese avión se va a utilizar para equipos médicos en centros de salud, en hospitales que hacen falta", afirmó López Obrador, que días atrás presentó el modelo de rifa que se usaría.

La idea sería vender 6 millones de rifas con un costo de 500 pesos mexicanos, algo más de 26,5 dólares, cada una.

El presidente mexicano reveló que intentaron venderle el avión al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, pues se averió el suyo. "Le mandamos decir si quería comprar el avión presidencial de México. No le entró, porque el avión que se le averió es de menor calidad y no tiene tantos lujos como el avión mexicano", dijo. 

La primera opción de AMLO era venderlo a Estados Unidos o intercambiarlo por equipamiento médico, pero la administración de Donald Trump nunca respondió. Semanas atrás, el presidente mexicano dijo que hubo ofertas por 125 millones de dólares, pero se rechazó porque estaba por dejado de la valuación de 130 millones que estableció la ONU.

La idea del sorteo había generado críticas por su difícil implementación, ya que tendrían que resolverse muchos detalles sobre el proceso de adjudicación del avión. "Se tiene que hacer todo un marco legal de la lotería para resolver, hay que resolver el pago de impuestos, ¿qué se hace con una empresa que compra determinado número de boletos? Todo eso estamos analizando, pero si pudieron reponer, pagar, este avión que fue un absurdo, ¿cómo no vamos a poder nosotros resolver para venderlo?", expresó López Obrador.

Además, dijo que le preocupaba el efecto que ganarse algo de esta magnitud podría tener en quien resultará triunfador del sorteo. "Mi única preocupación es que se trata de un bien qué significa mucho dinero y el dinero es una tentación, es la mamá y el papá del diablo, echa a perder el dinero a veces a las personas y yo no quiero que nadie se eche a perder, no quiero que se destruya ninguna familia porque si vale más que lo material y no quiero cargar con esa culpa. Eso es lo único que nos está deteniendo de cómo le hacemos para que el que se saque el premio no se desgracie", aseguró.

El presidente también dijo que analizan opciones para evitar que el hipotético ganador del sorteo no malvenda luego el avión. Una posibilidad es establecer que no se pueda vender por menos de la valuación de 130 millones.