Ley de Emergencia

Radicales y socialistas retoman el diálogo con Perotti y podría aprobarse la emergencia

Borgonovo trabaja para aprobar la "ley de necesidad pública" en la próxima sesión extraordinaria. La oposición pide el silencio de los halcones y el desdoblamiento de los proyectos

El gobierno provincial movió sus piezas y obligó al bloque del Frente Progresista, que domina la Cámara de Diputados, a volverse  a sentar a la mesa para discutir la "Ley de necesidad pública" que le otorga al ejecutivo mayor flexibilidad para disponer del presupuesto y enfrentar la situación crítica en materia económica.

Primero, fueron los intendentes quienes salieron a coro a pedir que se le garanticen las herramientas necesarias a la Casa Gris encabezados por los alcaldes de las dos principales ciudades: Pablo Javkin por Rosario y Emilio Jatón de Santa Fe, ambos del Frente Progresista.

La semana pasada, el gobierno convocó a una multitudinaria reunión con distintas cámaras empresarias, comerciantes y del trabajo para interiorizarlos sobre la situación financiera. Perotti y sus ministros fueron convincentes y quienes los escucharon reclamaron el aval legislativo a la propuesta del oficialismo.

De hecho, según pudo saber LPO, las entidades presentes, entre ellas la UIA Santa Fe y FISFE -Federación Industrial de Santa Fe-, amagaron con movilizar a la Legislatura el jueves próximo si la oposición se resistía a tratar la emergencia.

Este escenario empujó a los distintos bloques a retomar las negociaciones y en el oficialismo son optimistas en que esta semana se pueda destrabar en diputados el proyecto que lleva más de un mes discutiéndose.

Además, Perotti firmó el decreto que congela los peajes y la tarifa de los servicios de agua y electricidad por 60 días y su prórroga dependerá de la aprobación de la emergencia; "es un gesto del gobernador debido a la situación económica y social que enfrentan los ciudadanos", explicó la ministra del área, Silvina Frana.

La semana pasada, el ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo se reunió con los referentes de Cambiemos encabezados por la diputada Cesira Arcando. "Les contamos los cambios que hubo respecto de la vez pasada. Fue una reunión muy buena porque encontramos absoluta predisposición a tratar el tema", resumió el funcionario que tiene a su cargo las negociaciones.

El ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo y diputados del bloque Juntos por el Cambio

El próximo lunes será el turno del radicalismo que ya le adelantó al gobierno que se moverán en bloque, dejando a un lado las diferencias entre quienes se quedaron en el progresismo y la minoría que emigró al macrismo.

Al otro día, Borgonovo recibirá al socialismo que en caso de que vaya el presidente de la Cámara, el ex gobernador Miguel Lifschitz, Perotti acompañaría en la mesa. Un hombre clave para que el socialismo acepte retomar la discusión con el oficialismo fue Juan Carlos Zabalza.

El histórico dirigente del PS se puso al hombro el difícil rodeo de ablandar la posición que encarna Lifschitz. El ex mandatario estalla cuando en el gobierno dicen que la provincia está en rojo a lo que contesta que en su gestión se batió record en obras públicas y de entregar el poder con uno de los índices de endeudamiento más chicos en comparación con otros distritos.

Por el lado del radicalismo, fuentes del partido reconocieron a este medio que hay voluntad para el tratamiento de la emergencia: "hasta ahora está todo encaminado pero depende de qué pase de acá al lunes".

 Hasta ahora está todo encaminado pero depende de qué pase de acá al lunes 

Es que uno de los requisitos básicos para que las negociaciones no se vuelvan a empantanar es que los halcones del gobierno, los que disparan con munición gruesa contra el Frente Progresista, guarden cautela por estas horas. El mensaje tiene como principal destinatario a Marcelo Saín, el ministro de Seguridad que con sus críticas empantanó en dos oportunidades los avances del ala política.

La otra condición de la oposición es que haya desdoblamiento de la emergencia en seguridad y la económica. Un rumor que circuló el viernes es que el gobierno, envalentonado con el apoyo recibido, volvería a unificar el paquete de medidas en un solo proyecto. "Si es así, será difícil que se apruebe", advirtieron en la UCR.

Al interior del Frente Progresista no están exentos los juegos de poder. Pablo Javkin, a través de su diputado, Ariel Bermúdez del partido Creo, empujó para que la emergencia se apruebe desde un primer momento y con un doble interés.

Por un lado, porque el intendente necesita pagar los sueldos municipales a término y la administración no atraviesa la mejor situación financiera, sino todo lo contrario. Por el otro, porque la disputa por la conducción del Frente Progresista se activó el mismo 10 de diciembre pasado cuando Javkin se hizo cargo del Palacio de los Leones y Lifschitz asumía al frente de la Cámara de Diputados. Ambos aspiran a llevar las riendas del armado progresista y ninguno está dispuesto a ceder espacios.