El gobierno aprovecha la baja del crudo por el coronavirus y extiende el congelamiento de naftas
El brote del coronavirus en China le dio al gobierno la excusa ideal para extender el congelamiento de combustibles que mantiene desde su llegada a la Casa Rosada.
Sucede que el impacto que se prevé en la economía del gigante asiático afectó inmediatamente los valores futuros del precio del crudo a nivel internacional, que cayó unos ocho dólares en diez días y cotiza a 57 dólares en el Brent.
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Beijing es el segundo mayor importador mundial de petróleo, por lo que una desaceleración en su economía tiene un correlato directo en el precio del crudo. A su vez, según Barclays las suspensiones de vuelos hacia China podrían reducir la demanda de combustible de aviación en 300 mil barriles diarios.
Esta merma en los precios internacionales trajo alivio en Argentina, ya que diluyó el atraso que había en relación a los precios de los surtidores locales. De esta manera, Alberto Fernández pudo extender el congelamiento sin desatar el fuerte rechazo del sector, con quienes se reunió a mediados de mes y les prometió darle prioridad a la ley de Vaca Muerta.
De acuerdo a lo publicado en el Boletín Oficial, se posterga la actualización del impuesto a los combustibles hasta el 1 de marzo. Se trata de la segunda prórroga de este gravamen que se actualiza por trimestre según el índice de precios al consumidor (IPC).
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"Resulta oportuno, en esta instancia, disponer un nuevo diferimiento de los incrementos en los montos del impuesto sobre los combustibles líquidos. A efectos de encontrar soluciones de mediano y largo plazo, el Poder Ejecutivo Nacional ha iniciado un análisis integral de la actualización de los montos, para su futura adecuación", destaca el texto.
En este sentido, la idea del oficialismo es que la medida ayude a desacelerar el alza de precios y así poder llegar a un índice del 2% mensual en los próximos meses como había planteado el ministro Kulfas durante la campaña.