Bolivia

Jeanine Añez anuncia que será candidata en las elecciones presenciales de Bolivia

La presidente interina, quien había asegurado que no sería de la partida, dijo que quiere profundizar los cambios que han pacificado al país tras la salida de Morales.

 Jeanine Añez, presidente interina de Bolivia desde el alejamiento del poder de Evo Morales, anunció que será candidata en las elecciones general del 3 de mayo, revirtiendo su promesa, ratificada hace apenas unas semanas, de que no se presentaría en los comicios.

El anuncio lo hizo la propia Añez al filo del cierre del plazo para inscribir las candidaturas ante el Tribunal Electoral, y luego de días de rumores que indicaban que la ex senadora había cambiado de opinión en vista de las encuestas que le daban un amplio apoyo en la carrera electoral.

"Quiero dirigirme a las familias bolivianas para informales de mi decisión de presentarme como candidata a las elecciones presidenciales", afirmó la mandataria interina en el arranque de su discurso, en el que aseguraba que se presentaría en un alianza entre su partido, el Movimiento Demócrata Social (MDS), y otras dos formaciones que hasta hace días respaldaban la candidatura del moderado ex vicepresidente Carlos Mesa, principal adversario de Evo en las últimas elecciones.

Si bien Añez reconoció que "algunos encontrarán la medida difícil de entender", justificó su decisión en el riesgo para el país que significaría un triunfo del MAS, el partido de Morales, ya que se trata según ella de un grupo de "violentos ya que tienen más espacio".

"Ya no tenemos margen para equivocarnos", aseguró la presidenta interina, quien realizó un llamado a las otras fuerzas de oposición de sumarse a su candidatura, algo que ni Mesa ni el dirigente Camacho, otros de los aspirantes a la presidencia, están dispuestos a hacer. Ambos ya expresaron su negativa en bajar sus candidaturas.

"Los profundos cambios que ha vivido Bolivia son históricos. Esta campaña mirará al futuro para construir con esperanza", añadió Añez en su alocuación. "La democracia y la paz han llegado para quedarse. Continuaremos el trabajo de estabilizar y traer certidumbre y tranquilidad a nuestro país".

Añez ha tenido una tirante relación con el gobierno mexicano en su breve tiempo en el poder, acusando a AMLO de inmiscuirse en los asuntos internos de su país al darle asilo a Evo Morales en México y refugio a sus ex funcionarios en la embajada de su país, llegando hasta a echar del país a la embajadora por un confuso episodio en una visita de diplomáticos españoles a la sede mexicana en La Paz.