Mercados

La lección de Pesce a Kicillof

El actual presidente del Banco Central reestructuró con éxito en 2003 la deuda externa de la Ciudad.

Hay que pasar el verano: por primera vez el "contado con liqui" se operó por arriba del "dólar solidario" (el oficial más el 30%) al cerrar a 83,50 pesos. Se acabaron las vacaciones en el BCRA dado que el incremento de la brecha cambiaria generará varios efectos colaterales, como sucediera entre 2013-2015. En la reunión de directorio de la entidad que preside Miguel Pesce se decidió frenar el descenso de las tasas de interés. Se ingresa además ahora en la etapa en la que la oferta de divisas en el mercado oficial se restringe hasta que en el otoño surjan, si surgen, los dólares de la cosecha de soja. ¿Cuándo se empezará a hablar del atraso en el valor del dólar oficial?

El ruido, previsible por cierto, que está generando la renegociación de la deuda de la Provincia de Buenos Aires es mayor al imaginado por el gobierno nacional. El riesgo país volvió a niveles de 2000 puntos. El costo del no pago del vencimiento del bono de PBA será mayor a los u$s 275 millones en cuestión. Axel Kicillof y su ministro Pablo López están repitiendo errores del 2013-2015 cuando ambos estaban en el Ministerio de Economía de la Nación. Los acreedores les contestan con el bolsillo. Kicillof, al estilo Macri, quiere "reperfilar" un vencimiento de deuda, que luego tampoco será pagado. Entonces ¿por qué aceptarían bonistas ese reperfilamiento? Macri lo hizo con la deuda que tenía legislación argentina, compulsivo, y hasta en un hecho insólito en la historia de los mercados, no pagó ni siquiera vencimientos en pesos a empresas. Kicillof con este bono de PBA tiene que pagar dólares y en un título que tiene legislación Nueva York para evitar un eventual default. Los abogados en NY festejan por anticipado lo que será el inicio de una temporada con altos honorarios a cobrar una vez más de la mano de la República Argentina.

Puede pagar y no quiere Axel Kicillof. Paradójicamente, quien lo puede asesorar mejor al gobernador bonaerense es quien hoy se encuentra presidiendo el BCRA. Miguel Pesce en 2002 era el ministro porteño de Hacienda con Aníbal Ibarra como Jefe de Gobierno. Pese al default nacional en diciembre del 2001, Pesce cerró en poco más de un año, en febrero del 2003, la restructuración de las tres series del Bono Tango. Eran u$s 250 millones, $ 150 millones, y 100 millones de euros. Pesce viajó a Londres hasta con diputados opositores (estaba entonces Jorge Arguello por el duhaldismo, ahora embajador en EE.UU.) para mostrar compromiso duradero de la oferta y cerró un diferimiento en pagos de 3 años y corte de 30% en los cupones de interés. Los papeles tenían legislación londinense para tratar eventuales defaults y fue contratado el JPMorgan para asesorar en la operación que se aprobó con mayorías muy superiores al 75%, "No buscamos quitas en el capital porque no era necesario en nuestro cuadro de reestructuración. Pero si es necesario en el cuadro de la Nación porque la deuda nacional significa cuatro o cinco veces los ingresos totales que tiene. Por eso van a tener una negociación más dura que la nuestra", aclaraba a Clarín en febrero de 2003, Miguel Pesce.

Kicillof no es Pesce. No va a pagar. Pero el gobernador quiso postergar vencimientos hasta el 1 de mayo publicando únicamente una solicitada en diarios. Y sin dar muestras de lo que vendrá después. ¿Es necesario atar o replicar ofertas entre PBA y Nación? Los montos de deuda a renegociar no son comparables ni tampoco las situaciones fiscales. La deuda de PBA representa sólo el 7,5% de su PBI. Ahora bien, ¿irán de la mano Kicillof y Guzmán también en lo que pueda ser el éxito o fracaso de la renegociación de sus deudas?

El alumno de Joseph Stiglitz dispone de más tiempo que Kicillof. Pero no ha avanzado demasiado en 45 días. No habrá una oferta de la mano del Fondo Monetario Internacional. No se lo quiere. El organismo será un voyeur por decisión oficial. Las proyecciones que haga Guzmán sobre el superávit fiscal que tendrá la Argentina en los próximos años no serán muy confiables más cuando no se pueda estimar cómo se le va a ir pagando la deuda al FMI que vence a partir del 2021.

Guzmán apunta generar una oferta consensuada con bonistas antes de ser lanzada. Por ello mismo es que la misma viene siendo demorada. Ya hubo contactos de Lisandro Cleri, el renegociador de Guzmán, con fondos extranjeros. Semana próxima los continuará el ministro en NY. Alberto Fernández sabe, y lo ha manifestado a sus ministros, que en la renegociación de la deuda se juega el rumbo de su gestión en lo económico.

En teoría no es complejo cerrar el acuerdo con bonistas. Sin el FMI acompañando, las chances de que la oferta sea exitosa se reducen. Hay quienes no comparten esta teoría dado que el organismo solicitaría quitas de capital que luego pueden ser rechazadas por bonistas. Pero lanzar una oferta sin banco asesor complica el resultado dado que la llegada a los tenedores de papeles y su seducción para que acepten se dificulta. Hacerlo sin FMI ni banco asesor aparenta ser demasiado.

El informe del ejecutivo de banca privada que se camufla tras el seudónimo del "oso" tiene un capítulo sobre la Argentina. A continuación, los puntos principales de su envío a clientes:

1) El mercado norteamericano lleva 11 años de suba ininterrumpida donde el S&P cuadruplico su valor de 666 a 3350 puntos con la mayor expansión de la historia; las ganancias de las empresas no aumentan y gran parte de este rally es un tema de liquidez y tasas negativas o muy bajas gracias a las políticas monetarias por parte de los bancos centrales del primer mundo;

2) Las 5 empresas de mayor capitalización hoy (Apple, Microsoft, Amazon, Facebook y Google) representan el 17% del total del S&P;

3) El mercado de deuda sigue a todo ritmo esta semana; fueron varias empresas brasileñas; Rede D Oro, el mayor operador privado de hospitales, colocó un bono a 10 años al 4.5%;

4) Veremos si PBA consigue el 75% de adhesión (difícil) para postergar la amortización a mayo y a su vez veremos que hace la Provincia de Chubut que vuelve a intentar reestructurar su bono del 2026 con Ley NY;

5) Sepamos que para poder crecer se necesita un déficit fiscal que sea manejable, con una menor presión impositiva, con una inflación mucho menor y con precios relativos que permitan tener rentabilidad; por el momento han aplicado un plan de 180 días que seguramente termine como el Austral o el Primavera y de esa manera se habrá perdido otro año.