Mexico

AMLO quiere que el Estado se quede con el 70 por ciento de la energía de México

El resto corresponderá a privados y dependerá de la inversión que haga, pero el Financial Times asegura que la 4T dificultará estos planes.

 Andrés Manuel López Obrador encargó un objetivo específico a Manuel Bartlett al frente de la CFE: arrebatarle el control de los privados en la generación de energía eléctrica, un plan que ya toma forma, de acuerdo con el Financial Times, quien revela una ruta para encarecer la inversión de otras empresas.

Desde el arranque de la 4T el mandatario federal repartió el pastel: 60% sería energía generada por el estado y el 40% a privados,pero en su gira que este fin de semana lleva a cabo en centrales de la CFE por el país, aseguró que la participación estatal podría incrementar hasta en 70%, en caso de que no haya inversiones.

"Si ellos no invierten y no producen energía eléctrica lo vamos a hacer nosotros, si no invierte el sector privado lo vamos a hacer nosotros y puede que terminemos el sexenio con el 60 o 70% de la producción", dijo este sábado el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Antes recordó: "Se les dijo con claridad que cuando menos vamos a terminar con la misma proporción: 56% para la CFE y 44% para el sector privado. Vamos a competir, ellos tienen que invertir, tienen que abastecer de energía al mercado de acuerdo a la proporción de la demanda".

Estas palabras toman fuerza pues el mismo día el diario británico Financial Times reveló que la empresa de Bartlett ya desarrolla un plan que dificultaría la inversión de privados al incrementar sus costos.

El diario revela que tuvo acceso a una presentación de un plan que buscaría aumentar los costos de transmisión, mismos en los que las compañías basan sus planes de inversión, por lo que incrementaría también el costo de algunos proyectos. Se trata de un proyecto que golpea a aquellas empresas que generar electricidad a partir de energías renovables.

Y es que el plan eliminaría contratos entre generadores de energía y clientes privados, revocaría permisos y levantaría barreras' para la integración de energías renovables y la empresa eléctrica estatal sería quien decidiera sobre cómo se administra el mercado energético, dando preferencia a la generación privada de energía si está se distribuye en la red nacional.

Un ex funcionario de la industria, citado de manera anónima por el rotativo afirmó que "de aprobarse, las medidas eliminarían los incentivos a la inversión y destruirían absolutamente el mercado (de la electricidad)".

El discurso público de López Obrador ha sido claro desde el principio en su afán de fortalecer a la CFE y lograr autosuficiencia energética, similar a lo que ocurre en Pemex. Desde los primeros días de este Gobierno el presidente se lanzó duramente contra los privados, entonces revelaba que buscaría eliminar los subsidios.

"Una cosa es comprarles energía y otra cosa es que, además, de comprarles energía, a precio de mercado, se les dé un subsidio. Eso no. Eso se va a terminar", lanzaba López Obrador hace un año desde Chiapas, también a lado de Bartlett, quien antes de este gobierno fue un duro combatiente de la reforma energética, una clave para entender el fuerte respaldo que da el presidente a pesar de las polémicas entorno al directivo.