BAJA DE IMPORTACION AYUDA A RESERVAS

Las menores importaciones colaboran con el objetivo del gobierno de acumulación de reservas.

Por Simon Rifkin

De acuerdo a la información recientemente publicada por INDEC el balance comercial del primer semestre del 2006 acumuló un saldo positivo de USD 5.935 millones, casi un 8% superior al del año anterior. Esta mejora no se debe tanto al dinamismo de las exportaciones, que en volumen aumentaron un 5%, mientras que en 2005 lo hacían un 14%, sino a la desaceleración del crecimiento en la importaciones.

Las importaciones venían creciendo a altas tasas anuales desde el declive de 2002, lo que hacia temer que en un corto plazo el escenario en favorable en cuenta corriente se viera perjudicado, ya que las exportaciones no estaban creciendo a las mismas tasas que las importaciones, especialmente en volumen ya que los precios de los artículos que vende Argentina habían subido mucho de valor los últimos años.

Las cantidades importadas, que registraron un ritmo de aumento del 25% el año pasado, crecieron apenas la mitad (12%) en lo que va del año. La ralentización alcanza a todos los rubros, aunque es de baja magnitud en bienes de consumo como los automóviles.

Esto hace prever que nuevamente el país importa bienes para consumir en vez de bienes para invertir. Es evidente que la tasa de crecimiento de las importaciones muestra una tendencia declinante. El ritmo de desaceleración de las compras al exterior es mayor que el de la actividad económica. Así la elasticidad importaciones / PBI continua cayendo desde los máximos observados en 2003 hacia valores cercano a 2, bien por debajo del promedio de 3,6 registrado en el período 1994-2006.

Como reflejan los números del balance cambiario del 2º trimestre recientemente publicado por el BCRA, se ha producido una caída significativa en la entrada de capital del sector privado con respecto al mismo período del año anterior. Esto se debe principalmente a la incertidumbre acerca de la economía norteamericana y a la política de precios encarada por el gobierno que restringe las inversiones de las empresas.

Sin embargo, el crecimiento del saldo comercial, apoyado en una menor expansión en las importaciones, le permitiría la BCRA cumplir con le objetivo de recuperar las reservas perdidas por el pago al FMI.