RANDAZZO DISTANCIADO DE FELIPE SOLA

La decisión del gobernador de ir por la reelección pusó en crisis su relación con Randazzo.

Hasta no hace mucho tiempo era su mano derecha y hombre más leal. Cuando nadie se animaba fue él quien puso lo que había que poner para enfrentar al todavía todopoderoso duhaldismo. Fue también él primero en sostener que había que cerrar una alianza a fuego con Kirchner y dejar medias tintas. El tiempo le dio la razón.

Sin embargo, por esas cosas que tiene la política, Florencio Randazzo, podría ser la principal víctima del éxito de su estrategia. La aplastante victoria del kirchnerismo sobre los hombres de Duhalde sirvió para darle sobrevida política a Felipe Solá, un hombre que para desgracia del proyecto político del ministro de Gobierno bonaerense, empezó a recibir ciertas señales de apoyo desde la Casa Rosada a su proyecto reeleccionista.

Es que Randazzo, creía que existía un pacto de caballeros con su jefe inmediato y que en compensación por los servicios prestados -que entre otras cosas le permitirán a Solá terminar su mandato sin apurones institucionales-, el 2007 iba a ser su turno de gobernar la provincia de Buenos Aires.

Un importante funcionario del gabinete bonaerense confirmó a La Política Online, que por estas horas la relación entre Solá y su principal espada política, está atravesando un momento "delicado".

Habrá que ver si esto tiene alguna repercusión institucional, ya que no son pocas las áreas que en alguna medida se alinean con este joven político. Por caso la flamante ministra de la Producción bonaerense, Debora Giorgi, ve en Randazzo a su referente político inmediato.

El funcionario consultado, explicó a este medio que Randazzo, quien hace más de un año que viene trabajando territorialmente para consolidar su candidatura a gobernador, "está preocupado porque el tiempo pasa y ve en Felipe Solá una decisión cada vez más firme de avanzar con su reelección".

Parte de esa puja, por ahora sorda, que vive la cúpula del gobierno bonaerense, se expresó esta semana en las calles de La Plata. Sorpresivamente, días atrás afiches con las siglas del Frente para la Victoria (FpV) y la leyenda "Randazzo 2007", inundaron las calles de la capital provincial.

"La preocupación de Florencio es que por lejos el que menos mide en las encuestas, en parte por el gran desconocimiento que tiene. De movida, Aníbal Fernández le saca casi diez puntos, ni hablar de Felipe que le lleva más de treinta. Entonces, él tenía puestas las esperanzas en recibir desde octubre de este año a más tardar un espaldarazo de Felipe y asi empezar a consolidar su candidatura", reveló la misma fuente.

La depresión de Randazzo se acentuó esta semana cuando se vio "absolutamente desplazado" del escenario político provincial en los medios nacionales, y el debate giró en torno a la legitimidad de Solá para ir por la reelección, con las opiniones divergentes de dos figuras tan respetadas como el juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni - quien apoyó un nuevo mandato-, y el constitucionalista Gregorio Badéni - que manifestó su oposición-.

Por su parte, la semana que pasó, Pampuro por primera vez admitió su intención de ser gobernador, con lo cual se sumó al deseo manifiesto que tiene hace largo tiempo el ministro del Interior.

Aunque la fuente consultada no quiso asegurar que existiera un "enojo" de Solá con su ministro, si confió que el gobernador está muy atento a los desplazamientos políticos de Randazzo, y agregó que el mandatario provincial esta "obsesivo" ante cada definición que hace alguno de los suyos cuando son consultados respecto a la viabilidad de su tercer mandato.