EEUU

La trama ucraniana dinamita el centro de la carrera presidencial de EEUU

La historia de Hunter Biden en México. Revelaciones de Giuliani en la transición del 2018. El cálculo de la 4T.

Hunter Biden, el hombre del momento en la política de Estados Unidos, tuvo dos estancias en México en los años 2013 y 2014. Vino al país a tratar cuestiones de salud en un instalación exclusiva que luego serían ventiladas por la prensa sensacionalista del país vecino. En ambas conoció a algunas figuras de la política y el empresariado nacional.

En su momento, el comentario en ese pequeño grupo era que Hunter había mejorado en México y que tras su internación había asumido un importante cargo en una compañía gasera de Europa llamada Burisma. Es la empresa ucraniana que le pagaba 50,000 dólares por mes y que ha llevado tanto a la familia Biden como a la Casa Blanca a una zona de turbulencias por el proceso de impeachment iniciado por los demócratas.

Por estas horas en la Cancillería y en la embajada mexicana de Washington circulan diversos análisis sobre lo ocurrido pero hay uno que se reitera: la carrera de Biden por la nominación demócrata, y luego por la presidencia, parece terminada. La alternativa de centro en el partido de oposición pierde terreno frente a los dos grandes jugadores del sector más radical: Elizabeth Warren y Bernie Sanders. Curiosamente, son los rivales que Donald Trump pretende.

El presidente de EU está determinado a que el tema de su campaña para la reelección, como fue evidente en su último discurso en Texas, sea que la dicotomía es entre su gobierno y el "socialismo" que vendrían a representar Sanders y Warren. Biden, figura ineludible del centro político, es un problema para la polarización que agitan en la Casa Blanca.

En el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador se conoce mucho sobre la historia de Biden en Ucrania porque Rudolph Giuliani, abogado de Trump, le compartió ese relato a Marcelo Ebrard en algún momento de la transición del 2018. Mike Pompeo también hizo sus aportes cuando incursionó la Secretaría de Relaciones Exteriores para definir el plan antimigración de la frontera sur. Al parecer Burisma en algún momento tuvo interés en hacer negocios en México. Algo que no sería nada bien visto por el círculo de Trump.

La historia tiene una complejidad adicional porque en Burisma a la par que ingresó Hunter Biden, también llegó como consejero Joseph Cofer, un ex funcionario de la CIA para todos los avatares de seguridad en Europa Oriental.

La historia viene a decir que Biden, en su rol de vicepresidente de Barack Obama, hizo mucho para desplomar al presidente prorruso Víktor Yanukóvich pero que cuando lo logró ni este ni su entorno fueron encarcelados. De hecho, en su entorno está el dueño de la gasera Burisma, donde Hunter Biden trabajaría hasta abril de este año. Ya a fines del año pasado Giuliani operaba para que el hijo del ex vicepresidente fuera investigado por la autoridad en Kiev.

Toda este relato será explotado por los sectores más disruptivos del Partido Demócrata para eyectar al ex vicepresidente de la jugada. Hasta el momento Biden no ha logrado explicar casi nada. Solo atinó a mencionar que apoyará el impeachment contra Trump.

Para el Gobierno de Morena no es un dato alentador la preminencia que Sanders y Warren ganarán en la carrera electoral. Tienen fuertes objeciones al T-MEC, son críticos de las políticas de Derechos Humanos en México y tienen ideas complejas sobre la política antinarcotráfico de este lado de la frontera. Y Trump probablemente haga la campaña amenazado por el potencial juicio político.