FMI

Lipton reivindicó el programa con Argentina, pero advirtió por la incertidumbre política

A días de un nuevo desembolso de USD 5.400 millones, el titular del FMI analizó la situación del país.

El nuevo titular interino del Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a reivindicar el programa económico con la Argentina, pero reconoció los efectos negativos de la incertidumbre política de cara al proceso electoral.

"La Argentina ha tenido algunos altibajos. Entendemos que la incertidumbre política puede afectar sentimientos, pero la buena noticia es que el país ha implementado las políticas que diseñaron en el programa. Los llevaron a cabo, y está dando sus frutos", afirmó en una entrevista publicada por el diario británico Financial Times.

A su vez, allí también celebró la política monetaria de los principales banqueros centrales del mundo, en un claro mensaje a la reunión del G7 que tendrá lugar en Francia durante esta semana.

Alineado con Trump, el jefe interino del FMI apoya los nuevos estímulos monetarios para sostener la economía global en declive. "A la luz del lento crecimiento y los riesgos a la baja, tiene sentido que la política monetaria en los principales bancos centrales se mantenga acomodaticia", indicó.

El FMI confirmó a David Lipton, el economista de su ala dura, como Director Interino 

"Nuestra opinión es que si la economía necesita apoyo, usted brinda apoyo, pero no con políticas inapropiadas que contribuyen a la desaceleración, solo para estar en posición de luchar contra la misma desaceleración que se ha creado", agregó.

Las declaraciones de David Lipton se producen a días del próximo desembolso de USD 5.400 millones, con el cual se llegará al 78% de los fondos acordados en el Stand By que el último viernes tuvo su cuarta revisión positiva.

Por otro lado, esta semana el organismo internacional también dará a conocer el reporte técnico, más conocido como staff report, donde se informará detalladamente la opinión del FMI sobre el estado de la economía local.

Este informe puede traer novedades respecto a las condiciones acordadas, ya que el mismo viernes Lipton había adelantado algunas modificaciones pedidas por el Gobierno como una suba de la meta del tercer trimestre del balance primario de $60.000 a $70.000 millones y una ampliación del tope mínimo del gasto social.