Dólar

Tras la nueva política de intervención del Central, el dólar retrocedió a $45,60

En el primer día bajo el nuevo esquema cambiario, Sandleris sólo vendió los clásicos USD 60 millones diarios.

Como en el comienzo de una pelea de boxeo, el mercado se mantiene expectante ante los primeros movimientos del Banco Central, que bajo este nuevo sistema de intervención contará con un mayor poder de fuego.

No obstante, la máxima autoridad monetaria quiso garantizar un marcado retroceso del tipo de cambio para dar una fuerte señal y para ello convalidó una suba de tasa al 73,65% con una máxima que supera levemente el récord del 74% que se había visto en octubre del 2018.

De esta manera, el dólar retrocedió más de un peso para cerrar a $45,60 en el promedio minorista y a $44,32 en el segmento mayorista, ayudado por las clásicas subastas diarias de USD 60 millones, única intervención de Sandleris durante este lunes.

El FMI autorizó al Central a vender más reservas para intentar contener al dólar

Los especialistas sostienen que se trata del típico comportamiento frente a un nuevo escenario con distintas reglas de juego, que a corto plazo le dan a la máxima autoridad monetaria una posición de mayor fortaleza.

Es que a diferencia del esquema anterior, donde sus cartas estaban marcadas y su rango de maniobra para frenar al dólar era limitado, ahora nadie sabe cuándo ni con qué montos podrá salir a jugar.

Sin embargo, no está garantizado que esta situación pueda durar mucho tiempo. En la city saben que la cantidad de reservas de libre disponibilidad tiene un techo y por lo tanto, es probable que poco a poco empiecen a "contarle las costillas" a Sandleris.

El nuevo plan para frenar el dólar reactiva la presión sobre las reservas

"Veremos cuándo lo testean a Guido. Pensá que hasta acá nunca tuvo que operar él. No van a dejarlo pasar sin testearlo", indicaron a LPO sobre la inexperiencia de Sandleris en esta pelea que ya se llevó puestos a sus dos antecesores. 

A su vez, está claro que la incertidumbre política de cara al año electoral recién está comenzando. En consecuencia, lejos de reducir la posibilidad de dolarización de carteras, la mayor oferta del Central garantiza el financiamiento de la fuga.