Elecciones 2019

Por temor al default, llegan al país fondos de inversión para entrevistarse con el kirchnerismo

"Estoy esposado a un radiador", afirmó a LPO el directivo de un fondo que le prestó dinero a la Argentina.

Fondos de inversión de Estados Unidos y Europa llegaron al país en busca de entrevistas con ex funcionarios del equipo económico de Cristina Kirchner para evaluar sus posibilidades de cobrar el dinero de sus clientes que le prestaron a Argentina.

Buscan hablar con Alberto Fernández, Axel Kicillof, Emmanuel Álvarez Agis y Wado de Pedro para calmar su ansidedad ante el interrogante que se repite: ¿Cristina piensa defaultear?.

No. La respuesta es siempre la misma: "No creemos que ir a un default sea lo mejor para la Argentina" y reiteran que ellos pagaron al Club de París, al CIADI y abrieron la negociación con los holdouts porque siempre tuvieron intención de volver al mercado.

"No somos anti-empresa ni queremos defaultear la deuda", dijo Kicillof. "Cancelamos la deuda con el CIADI y renegociamos con los holdouts y después pasó lo que pasó con los fondos buitre. Si lo hicimos fue porque nuestra idea era volver a los mercados", explicó el ex viceministro Álvarez Agis.

Cristina se despega de la corrida y anticipa que no piensa defaultear 

Los movimientos de los fondos, que buscan todos los caminos posibles para acceder al entorno económico de Cristina tiene una lectura política: Creen que es un escenario probable que la ex presidenta regrese al poder. "Estoy esposado al radiador, ahora tengo que ver cómo lidio con esta situación", graficó a LPO un directivo de un fondo de Estados Unidos que estuvo esta semana en Buenos Aires. Fue su manera de explicar que se siente rehén de los bonos argentinos que compró en su momento.

"lo único que me piden es un contacto para llegar a los kirchneristas", agregó sorprendido a LPO un experimentado operador de Wall Street, con años de operar en la Argentina.

"Llegó Macri y otra vez caímos en la seducción de los argentinos, en la idea que ahora sí el país se iba a convetir en lo que todos esperamos", agregó desanimado.

"Estoy esposado al radiador, ahora tengo que ver como lidio con esta situación", graficó a LPO un directivo de un fondo de Estados Unidos que estuvo esta semana en Buenos Aires.

El directivo trazó su análisis de lo que viene si gana Cristina, como surgiere la encuesta de Isonomía que LPO publicó en exclusiva: "Ella va a decir, les quiero pagar pero no me alcanza la plata y nos va a obligar a renegociar la deuda".

El fantasma de un nuevo default se alimenta en la enorme dificultad que plantea pagar los vencimientos que se pasaron para el 2020. La situación es tan evidente que desde el peronismo federal este viernes se sumó, Miguel Ángel Pichetto: "Argentina tiene como país un compromiso con los bonistas que confiaron en los bonos argentinos. Cualquier cosa que haya que reformular con los organismos internacionales hay que hacerlo de común acuerdo con racionalidad y responsabilidad. No podemos caer en un nuevo default". Un día antes lo había anticipado en diálogo con LPO.

Pichetto estuvo esta semana en Nueva York reunido con fondos de Wall Street, un termómetro de lo sensible que es la situación. Si bien está en las antípodas de Cristina Kirchner, no es ajeno al clima de época.

Es que no es claro cómo piensan en el kirchnerismo pagarles lo adeudado a los fondos. Porque los montos de vencimientos son más que complicados sin acceso a los mercados voluntarios de deuda por más que el déficit de cuenta corriente esté prácticamente saldado y la devaluación haya motorizado el regreso del superávit comercial.

"El tema es que si bien ellos dicen que van a pagar la deuda, 1) el pasado los condena, y 2) para pagar necesitás que te presten, y eso es difícil. Ellos usaban reservas, pero ahora no van a tener muchas", resumió desde Nueva York a LPO un analista de un banco internacional que participó de estos encuentros con ex funcionarios.

Los dichos de los voceros económicos de Cristina pueden despejar la voluntad de defaultear, pero el mercado también le teme a una reestructuración con quita de capital.

Los dichos de los voceros económicos de Cristina pueden despejar la voluntad de defaultear, pero el mercado también le teme a una reestructuración con quita de capital. Y en este sentido, desde Nueva York consideran que sí va a haber quita para que sean pagables en el tiempo los intereses.

En el kirchnerismo no saben con qué situación se pueden encontrar el 10 de diciembre si es que ganan las elecciones. Si el dólar se dispara y con él se disparan los intereses de deuda por encima de lo sustentable, no descartan que no quede otra que ir a una reestructuración de la deuda con los privados.

De momento, la postura de Álvarez Agis es que de mínima van a necesitar reestructurar los plazos de devolución del crédito Stand-By con el FMI. Y con eso pueden descomprimir las necesidades financieras de 2021 y no incumplir con los privados.

Pero si se dificultara demasiado rollovear la deuda el año que viene (los intereses son cercanos al 3% del PBI), también saben que estar peleados con el FMI solo empeora las cosas y que pueden valerse de un vínculo fructífero con el organismo para que les sirva de contacto con el mundo de las finanzas internacionales en el que no tienen la mejor recepción.

Es que saben también que Lagarde está políticamente jugada con la asistencia a la Argentina y que con el FMI de aliado es factible que sea el Fondo quien ayude al país a reunir a la cantidad necesaria de bonistas con los que renegociar una quita en caso de que sea necesario.