Mercados

La Fed anunció que no sube las tasas hasta 2020

Por la desaceleración económica, la Reserva Federal de los Estados Unidos decidió que no habrá subas este año.

Los mercados internacionales festejaron la decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos, la Fed, de mantener las tasas de interés dentro del rango del 2,25% al 2,50% atento a la menor tasa de actividad y las curvas de tasas de interés invertidas que hacen pensar en una recesión en ciernes. Los festejos duraron poco. Después de la confirmación de las expectativas del mercado a las 14:15 de este miércoles, hubo una rápida toma de ganancias.

Este miércoles, se reunió el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) y además de mantener las tasas, hizo público el cambio de la hoja de ruta de la institución: de las dos subas de tasas proyectadas para 2019 en la última reunión del año pasado, pasó a descartar las subas por lo que resta del año y el fin de la reducción de la hoja de balance de la institución para septiembre. De hecho, una encuesta a agentes de mercado y consultoras -tipo REM- de ese país incluso hipotetizaba la posibilidad de una baja de 25 puntos básicos hacia fin de año.

Esta hipótesis no fue corroborada. En cambio se plateó la posibilidad de una suba de tasas recién en 2020 y tasas planas en todo 2021. Para esta decisión fue clave que se mantuvieran invariables las expectativas de inflación en 1,9% anual pese a los buenos datos del mercado de trabajo.

La reducción de la hoja de balance no será abrupta. La Fed comenzará en el mes de mayo a suavizar la baja de activos y pasivos hasta estabilizarse en el mes de septiembre.

En el comunicado posterior a la reunión, la Fed precisó que "información económica recibida desde la reunión de enero ha mostrado que el mercado laboral continúa fuerte pero que el crecimiento de la actividad económica se ha ralentizado respecto al sólido crecimiento del cuarto trimestre de 2018".

Por su parte, el presidente de la Fed, Jerome Powell, en la conferencia de prensa volvió a apelar a la "paciencia", palabra con la que había puesto fin a su confrontamiento con Donald Trump por su pretensión de evitar con la política monetaria el recalentamiento de la economía que impulsaba el magnate desde la política fiscal.

En su presentación pública, Powell apuntó a la desaceleración del crecimiento en Estados Unidos, la Eurozona y China, y recordó que cuando en 2017 se sincronizó el crecimiento mundial, Estados Unidos tuvo "viento de cola", pero ahora se encuentran más bien ante un "viento de frente". En este sentido fue que Powell remarcó que la Fed será "paciente y observadora" antes de tomar ninguna decisión de tasas.

En el mercado recibieron esto como una buena noticia y las monedas en su conjunto mostraron cierto alivio respecto al dólar. Pero rápidamente se pasó a la toma de ganancias. El Dow Jones y el Nadaq cerraron con bajas del 0,1% y el S&P 500 con una caída del 0,1%.

En el caso del mercado argentino lo que se observó fue una caída en dólares y un impulso en pesos por impulso de la divisa. Los ADRs argentinos terminaron bastante golpeados en Wall Street: IRSA cayó 4,4%, Edenor perdió 2%, Central Puerto bajó 2,5%, grupo Galicia retrocedió 1,6% y el banco Supervielle, 1,3%.

Sin embargo, el salto que dio el dólar frente al peso -incluso con suba de la tasa de Leliq a 65,407%- hizo que las valuaciones de las acciones en pesos terminaran con subas. Por ejemplo, Edenor cerró 0,6% más arriba en pesos y Central Puerto acortó sus pérdidas al 0,6% intradiario. Así el índice S&P Merval terminó con una suba del 1,1%.