Un ex Telefónica busca quedarse con El País de España

Es César Alierta, un empresario aliado del mexicano Peña Nieto. Opera para que el fondo Amber asuma el control de Prisa.

 César Alierta vuelve a la carga en Prisa. El histórico ex presidente de Telefónica está empeñado en regresar a la primera línea empresarial y se ha situado en el centro de la operación para que el fondo estadounidense Amber Capital, lance una OPA y de un vuelco al accionariado del conglomerado de medios español, con fuerte implantación en México.

Alierta, que llegó al país como aliado del ex presidente Enrique Peña Nieto, se está moviendo para enganchar importantes socios españoles a la operación y así evitar las reticencias que provocaría que uno de los buques insignia de la comunicación en España quedara bajo el control total de un fondo neoyorquino.

La editora del diario El País está dominada por el fondo buitre, que posee un 27% del capital y continúa comprando pequeños paquetes accionariales. Si llegase al 30%, Amber estaría obligada a lanzar una OPA por la totalidad de la empresa. En la situación opuesta -de salida- se encuentra el grupo de rescatistas que en 2012 salvó a Prisa de la quiebra: Telefónica, Santander, HSBC y CaixaBank. En aquel momento el gobierno de Mariano Rajoy, del Partido Popular, les pidió que salvaran al gigante de medios, pero hoy todos consideran pagado el peaje institucional.

Es un hecho que Telefónica se quiere deshacer del 9,4% que conserva. Hay que recordar que llegó a poseer un 13% en época de Alierta. Por su parte, Caixabank ya redujo al mínimo su participación (1,4%) y según información del portal Merca2, tanto HSBC (10%) como Santander (4%) estarían pensando en vender su parte en Prisa. Este último sería el más arraigado tras colocar a Javier Monzón, muy cercano a Ana Botín, como consejero delegado en sustitución de Juan Luis Cebrián. Aún así querrían salir porque "Monzón ha perdido peso al dejar de ser el intermediario con La Moncloa una vez que el PP ha sido expulsado del Gobierno". Este escenario puede favorecer los planes expansivos de Amber, pero con la nueva convocatoria de elecciones el 28 de abril las cautelas son máximas.

Con Amber queriendo comprar y el resto con ganas de irse la operación debería ser sencilla, pero cuando se trata de Prisa no hay nada fácil. Los medios que posee (El País, Cadena Ser, As, Cinco Días) son tan influyentes que muchos verían con malos ojos su desespañolización. La relación entre el todavía presidente español Pedro Sánchez y Joseph Oughourlian, CEO de Amber ha sido fluida durante su breve mandato. Nueve meses en los que se han reunido varias veces y Prisa ha vuelto a su tradicional cercanía editorial a los gobiernos socialistas.

No parece que haya sido suficiente para paliar su condición de inversor foráneo, de modo que Alierta sigue adelante con su plan para incorporar a la OPA de Amber a dos grupos españoles cuyo principal negocio, esta vez sí, son los medios de comunicación. (Según recoge el digital El Español su gran interés se fundamenta en la posición que ocupa al interior del "hedge fund", que podría llegar a una cuarta parte de Amber.)

En primer lugar está Henneo, grupo aragonés con unas cuentas saneadas, en pleno proceso de expansión y controlado por el propio César Alierta. La otra clave está en el grupo Planeta, de la familia Lara. El ex Telefónica lleva meses en conversaciones con el vicepresidente José Lara para convencerle de que se sume a la aventura, según las fuentes citadas.

 Ana Botín, CEO de Santander. 

Alierta ya había intentado sentarse en la mesa de Prisa anteriormente, ofreciendo 25 millones a Telefónica por su participación. Esa operación no prosperó pero ahora el histórico ejecutivo insiste, sabedor de que los rescatistas están ansiosos por recibir una oferta que compense su inversión.

Hoy mismo se ha conocido el cierre de otro movimiento que apunta en la misma dirección: Prisa ha recuperado el control total de Santillana tras desembolsar 312 millones de euros con el respaldo de Amber, Santander y Telefónica. El grupo editorial es la joya de la corona y aporta el 70% de los ingresos de PRISA. Sin Santillana, el interés de Amber en fortalecer su posición se diluiría.

Prisa, que mantiene una deuda cercana a los 1000 millones de euros, lleva años tratando de crecer en México y mantuvo una fuerte vinculación con la pasada administración. Este diario informó de la oferta que habría recibido el expresidente Enrique Peña Nieto para incorporarse a su consejo de administración siguiendo los pasos de otro ex mandatario, Ernesto Zedillo, que ocupó la silla entre 2010 y 2017.