AFIP

La recaudación cayó por sexto mes consecutivo y cerró el 2018 con una merma del 2,31%

En diciembre la caída real alcanzó el 7,86% en una dinámica que aseguran se mantendrá en los próximos meses.

 La fuerte recesión que atraviesa la economía argentina sigue impactando directamente en los ingresos tributarios del Estado, que en diciembre tuvieron su sexta caída consecutiva y finalizan el 2018 con una merma del 2,31% en términos reales.

De acuerdo a los datos publicados por AFIP, en el último mes del año la recaudación mostró un crecimiento de 36%, mientras que las estimaciones privadas proyectan una inflación interanual de 47,6% para este período que arrojan una caída del 7,86%.

Los peores resultados del mes se observaron en el IVA aduanero (9,5%), los tributos ligados a la seguridad social (22,5%) y el impuesto a los débitos y créditos (32,6%). Por el contrario, los que más aumentaron fueron los derechos de exportación (325%), el IVA impositivo (49,4%) y los derechos de importación (40,5%).

En cuanto al total del 2018, los ingresos tributarios crecieron el 31,2%, al ascender a $3.382.644,5 millones, frente a una inflación promedio del 34,3% para ese período.

De esta manera, los ingresos bajan a una mayor velocidad que la pretendida reducción del gasto, dificultando el cumplimiento del déficit cero. "La recaudación difícilmente crezca en 2019 porque vas a tener una actividad que no va a recuperar lo suficiente", anticipó a este medio Juan Ignacio Paolicchi, de la consultora Eco Go.

El mayor dinamismo para el total del año pasado se presentó nuevamente en el comercio exterior por la suba del dólar y la aplicación de las nuevas retenciones que impactaron en los derechos de importación (51,7%) y en los derechos de exportación (72,7%).

Este componente fue anunciado cuanto se decretó la nueva meta de equilibrio fiscal, previendo que una baja del gasto no sería suficiente. Pero aun así, no alcanzó para compensar el pobre desempeño mensual.

Posteriormente, le siguieron el IVA neto con una variación interanual del 44,3%, el impuesto a los débitos y créditos (35,6%) y el impuesto a las Ganancias (33,7%).

Los que evolucionaron por debajo de la inflación fueron los sectores de la seguridad social (24,7%), aportes personales (26,2%), contribuciones patronales (24,3%) y bienes personales, (-34,5%), con una incidencia negativa del aumento del mínimo no imponible y la baja de la alícuota para el período fiscal.