Senado

Con los votos del PJ y el kirchnerismo, el Senado nombró al juez que pedía Gerardo Zamora

Es Sebastián Argibay, presidente de la Corte de Santiago del Estero. Macri lo había propuesto, pero Carrió y la UCR lo impugnaron por habilitar un tercer mandato del gobernador.

Gerardo Zamora tuvo un fin de año soñado en el Congreso: la senadora Ada Itúrrez de Cappellini se sumó al Consejo de la Magistratura y Sebastián Argibay, presidente de la  Suprema Corte de Santiago del Estero, fue nombrado esta tarde a cargo del juzgado federal 2 de la provincia pese a la resistencia de Cambiemos.

Sin debate, en una sesión que duró menos de dos horas porque los senadores temían quedarse sin vuelos, el pliego de Argibay fue aprobado sólo con los votos del justicialismo y del kirchnerismo.

Cristina no estuvo porque llegó tarde, pero sus 8 compañeros se asociaron a los dirigidos por Miguel Pichetto, santiagueños y misioneros, suficiente para llegar a 37 votos, lo justo para una mayoría simple.

Como habían anunciado en la última reunión de la Comisión de Acuerdos, Cambiemos votó en contra pese a que el pliego de Argibay, como todos los que llegan al Senado, fue refrendado por el ministro de Justicia Germán Garavano.

Garavano envió el pliego de Argibay, pero Carrió y la UCR lo impugnaron. Zamora logró el respaldo del peronismo que además le garantizó un cargo en la Magistratura. 

Pero luego apareció una impugnación Elisa Carrió, que le recriminó haber autorizado un tercer mandato de Zamora en 2013, que no fue posible por un fallo de la Corte Suprema de Justicia. Recordó también que está investigado por "encubrir y participar" de una red de narcotráfico de Santiago del Estero, a partir de una denuncia del juez Miguel Ángel Moreno.

Cuando Argibay expuso en audiencia pública, los senadores de Cambiemos minimizar on la denuncia por narcotráfico, porque fue desestimada por el fiscal Carlos Rívolo; pero no le perdonaron haber reinterpretado la Constitución santiagueña para autorizar una segunda reelección del gobernador.

Lograron apartar el pliego con su presión, pero Rodolfo Urtubey, a cargo de la Comisión de Acuerdos, lo puso a votación cuando volvió a reunirla y la sociedad del PJ y el kirchnerismo alcanzó para firmar dictamen a favor.

"Si se trata en el recinto, vamos a votar en contra", anunció Pinedo esa mañana. Enterado, Zamora diseñó un contrataque en la definición de los cargos de la Magistratura, organismo encargado de nombrar y sancionar jueces: se asoció al PJ para quedarse con uno de los tres senadores que lo integran y aportó sus 6 diputados para arrebatarle a Cambiemos una de las dos bancas que tenía por esa Cámara.

"Estamos perdiendo un consejero por votar en contra de un juez que van a nombrar igual", le advirtieron Emilio Monzó y Nicolás Massot al radical Mario Negri. Este miércoles supieron que estaban en lo cierto. 

Zamora es radical, se sumó al kirchnerismo en 2005, nunca devolvió la llave del Comité provincia y logró una estrecha relación con Cristina y Carlos Zannini, que le permitió ser presidente provisional del Senado en 2013.

Pichetto lo resistió pero luego lograron llevarse bien hasta hoy y suele invitarlo a cada cumbre con gobernadores peronistas. No nunca falta. Sabe cotizar su presencia.