Bono

El Gobierno adelanta el pago del bono y el aguinaldo de estatales para evitar un diciembre caliente

La medida se suma al aumento del 10% acordado con Andrés Rodríguez que se aplicará durante enero y febrero.

En uno de los años de mayor conflictividad social en mucho tiempo por la fuerte recesión que atraviesa la economía argentina, el Gobierno está trabajando para evitar un diciembre caliente.

En primer lugar, el pago del bono de $5.000 pesos para estatales que estaba previsto para el 2 de enero, se adelantará a la primera quincena de diciembre junto al aguinaldo.

Macri firmó el decreto que fija un bono de $5.000 y le pone trabas a los despidos

La medida informada por el Ministerio de Hacienda abarca a todo el personal de la Administración Central, Organismos Descentralizados y Empresas Públicas del Estado Nacional.

De acuerdo al cronograma de pagos establecido, el miércoles 12 cobrarán los empleados de la Administración Central y agentes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, el jueves 13 lo harán los organismos descentralizados y finalmente el viernes 14 será el turno de los trabajadores de las empresas públicas.

Para el economista Claudio Lozano, el bono representa apenas el 6,4% de lo perdido por los estatales y en consecuencia debería oscilar entre los $77.000 y los $93.000 para recuperar el poder adquisitivo. 

Paralelamente, a partir de la negociación entablada entre el Ministro de Producción y Trabajo Dante Sica y el Secretario General de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), Andrés Rodríguez, se acordó un aumento salarial del 5% para enero y otro 5% a aplicarse al mes siguiente.

Macri reconoció que la pobreza seguirá aumentando y anunció un bono para fin de año

El anuncio se suma al pago extraordinario para programas sociales y AUH -también a efectuar en el último mes del año- que había prometido Macri el día que se publicó el último aumento de la pobreza.

Como es sabido, la inédita devaluación de la moneda produjo un impacto directo en la inflación que llegó al 5,4% en octubre y de acuerdo a los especialistas terminará el año en torno al 45%.

Este incremento, que representa el mayor índice desde 1991, está generando una pérdida del salario real que para agosto ya alcanzaba los 10 puntos porcentuales.